EL CAIRO, 10 Mar. (Reuters/EP) -
Rusia y la Liga Árabe han manifestado este sábado su acuerdo en la necesidad de poner fin de inmediato a la violencia en Siria y en el envío de una misión de observadores imparciales que dé información veraz sobre lo que está ocurriendo realmente en el país.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, y los ministros de Exteriores de la Liga, reunidos en El Cairo, han acordado un documento de cinco puntos en el que se rechaza expresamente cualquier tipo de intervención extranjera, se pide que se facilite el envío de ayuda humanitaria y se respalda al representante especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Anan.
Lavrov y el ministro de Exteriores qatarí, el jeque Hamad bin Jassim al Thani, han anunciado este acuerdo en rueda de prensa conjunta en la que no han admitido preguntas.
La postura de la Liga era de exigencia para con Moscú, al que pedían condenar la violencia del régimen sirio. Sin embargo, Rusia ha insistido una vez más en que su política respecto a Siria se basa en un principio de no interferencia y ha rechazado que esté protegiendo al Gobierno del presidente sirio, Bashar al Assad.
Durante el encuentro, Al Thani ha defendido el reconocimiento del Consejo Nacional Sirio, principal organización de la oposición, como legítimo representante del país árabe. "Tenemos que trasladar un mensaje al régimen sirio: la paciencia del mundo se ha agotado y nuestra paciencia se ha agotado, al igual que el momento del silencio sobre sus prácticas", ha afirmado Al Thani. "Desde aquí pedimos el reconocimiento del Consejo Nacional Sirio como representante legítimo del pueblo sirio", ha añadido.
Lavrov, por su parte, ha manifestado la disposición de Rusia a colaborar con cualquiera que aspire a implantar reformas en Siria, pero, ha indicado, no se puede atribuir la violencia a una sola de las partes. "Rusia no está protegiendo a ningún régimen. La tarea más urgente es poner fin a todo tipo de violencia", ha afirmado.