MADRID, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Sudán del Sur han asegurado que un grupo de personas armadas que ocuparon recientemente la localidad de Gumuruk, en el Área Administrativa de Gran Pibor, se han retirado de la zona, en medio de un repunte de los enfrentamientos intercomunitarios en este área del país africano.
El portavoz del Ejército sursudanés, Lul Ruai Koang, ha manifestado que las fuerzas gubernamentales volvieron a entrar en la ciudad durante la tarde del miércoles, después de la retirada de los asaltantes, que habrían llegado al lugar desde el adyacente estado de Jonglei.
"El Ejército volvió ayer a Gumuruk tras la retirada de los jóvenes armados de Jonglei, que se fueron por su cuenta", ha manifestado en declaraciones concedidas a la emisora Radio Tamazuj. Asimismo, ha recalcado que los militares están preparados para responder a este tipo de ataques.
Por su parte, el ministro de Gobierno Local del Área Administrativa de Gran Pibor, Simon Peter Ajeny, ha confirmado que el Ejército "ha recapturado" la localidad de Gumuruk, al tiempo que ha indicado que "la situación es difícil". "La totalidad de la localidad, con 50.000 casas, tres escuelas y un centro de salud, ha sido reducida a cenizas", ha apuntado.
James Morgan Pitia, representante de Sudán del Sur ante la Unión Africana (UA), ha pedido al organismo que ayude al Gobierno central en sus esfuerzos para lograr el desarme y desmovilización de este tipo de milicias y ha recordado que el bloque hizo lo propio "cuando terminaron las guerras en Liberia y Sierra Leona", según la emisora Eye Radio.
Las autoridades de Jonglei reclamaron el miércoles al Gobierno central que intervenga y ponga fin a los combates, al tiempo que pidieron la retirada de los asaltantes. En este sentido, el ministro de Información de Jonglei, John Samuel Manyoun, tildó a estas personas de "criminales".
Naciones Unidas expresó la semana pasada su "profunda preocupación" por los llamamientos a la movilización de miembros de la comunidad nuer en Gran Jonglei y alertó de que podría derivar en "ataques masivos" contra la población en esta zona de Sudán del Sur.
Sudán del Sur cuenta con un Gobierno de unidad que echó a andar tras la materialización del acuerdo de paz de 2018 entre el presidente, Salva Kiir, y el líder rebelde Riek Machar, que derivó en que este último volviera a ocupar el puesto de vicepresidente primero del país africano.
Pese al descenso de la violencia por el conflicto político, el país ha registrado un aumento de los enfrentamientos intercomunitarios, motivados principalmente por el robo de ganado y las disputas entre pastores y agricultores en las zonas más fértiles del país, especialmente a causa del aumento de la desertificación y el desplazamiento de poblaciones.
