BANGKOK, 2 Abr. (EP/AP) -
Los primeros resultados parciales de las elecciones generales celebradas de urgencia este domingo en Tailandia muestran que la abstención ha superado al voto en la mayoría de los distritos de la capital.
Bangkok es baluarte del movimiento que reclama la renuncia del primer ministro Thaksin Shinawatra por presunta corrupción y abuso de poder. La capital tradicionalmente es el primer distrito que informa sus resultados. La fuerza de Thaksin reside en el campo, cuyos resultados suelen llegar más tarde.
Las cifras disponibles a las 16:00 horas indicaban que la abstención había superado al partido gobernante Thai Rak Thai --Tailandés Ama a Tailandés-- en numerosos distritos. Está previsto que los primeros resultados a nivel nacional no se conozcan hasta mañana.
Los tres partidos de oposición intentaron boicotear los comicios instando a los 45 millones de votantes llamados a las urnas a marcar la abstención en las papeletas. "La gente no aceptará esta elección y la situación política empeorará", dijo Banharn Silpa-archa, dirigente del partido opositor Chat Thai antes de conocer los resultados iniciales.
En un primer momento, la votación fue pacífica. Posteriormente, la explosión de bombas en algunos colegios electorales dejó cuatro soldados y un policía heridos, según informó la Policía. Sin embargo, las autoridades han informado de que la participación ha sido alta, llegando a alcanzar en algunos sitios el 70%.
Thaksin convocó estas elecciones con casi tres años de anticipación para reforzar su mandato después de semanas de protestas callejeras. "Quiero felicitar a todos los tailandeses porque hemos conservado la democracia", dijo Thaksin al concluir la votación.
"Quiero exhortar a todos los sectores de la sociedad a respetar las normas y la decisión popular". El boicot transformó la elección en un acto unipartidista en 276 distritos electorales, donde el partido no tenía oposición.
Thaksin ha prometido renunciar si su partido recibe menos del 50% de los votos, lo cual parece improbable dado el apoyo del que goza entre la población rural. La esperanza de la oposición es que el boicot impida cubrir las 500 bancas, con lo cual, según expertos en derecho, sería imposible convocar al Parlamento y formar un nuevo gobierno.
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