Milicianos talibán
STRINGER AFGHANISTAN / REUTER
Actualizado: jueves, 12 noviembre 2015 8:25

MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los talibán han secuestrado este miércoles a doce civiles en la localidad afgana de Sayed Karam, ubicada en la provincia de Paktia (sur), en un momento de grandes tensiones por el rapto y decapitación de siete miembros de la comunidad chií hazara a manos del grupo yihadista Estado Islámico.

El jefe local de Sayed Karam, Niaz Muhamad Jalil, ha indicado que los secuestrados se dirigían a Gardez, la capital provincial, cuando fueron interceptados por los talibán, según ha informado el diario local 'The Afghanistan Times'.

Por su parte, el grupo insurgente ha confirmado su responsabilidad en el secuestro, si bien ha argumentado que los secuestrados son agentes de policía que se dirigían a Gardez para cobrar sus salarios.

Durante la jornada del miércoles, al menos ocho personas resultaron heridas en los alrededores del palacio presidencial debido a la intervención de las fuerzas de seguridad durante una manifestación en protesta por las decapitaciones llevadas a cabo por el Estado Islámico.

Los hazaras, en su mayoría chiíes, han sido duramente perseguidos en Afganistán y fueron masacrados por los talibán y Al Qaeda en los años noventa. Una serie de asesinatos y secuestros durante este año han avivado un ambiente de creciente desesperación.

El presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, ha condenado los asesinatos y ha prometido una investigación que esclarezca los hechos pero la sensación de inseguridad no ha dejado de aumentar desde que los talibán se hicieran brevemente el control de la ciudad de Kunduz en septiembre.

El martes salió a la luz que los talibán ejecutaron por ahorcamiento el lunes a ocho de milicianos del Estado Islámico que combatían en sus filas por su responsabilidad en las decapitaciones, si bien estas informaciones han sido contradichas por las autoridades locales.

Los secuestrados fueron ejecutados en el marco de los enfrentamientos registrados en los últimos días en la provincia entre dos facciones rivales del grupo --una de las cuales cuenta con el respaldo del Estado Islámico--, que se han saldado con la muerte de al menos 80 personas.

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