ANKARA, 15 Sep. (Reuters/EP) -
La Policía de Turquía ha detenido este viernes al abogado del principal líder de la oposición, Kemal Kilicdaroglu, por supuestos vínculos con la red del clérigo opositor Fetulá Gulen, al que Gobierno turco acusa de organizar el fallido golpe de Estado de julio de 2016.
El abogado detenido, Celal Celik, es un antiguo juez que dimitió de su puesto como magistrado en septiembre de 2011 en señal de protesta por el aumento de la influencia de la organización de Gulen en el sistema judicial turco.
Celik ha sido puesto bajo arresto domiciliario este viernes en su domicilio en Ankara como parte de la operación policial que tiene como objetivo acabar con la red de seguidores del clérigo.
El Gobierno turco acusa a Gulen de haber orquestado el intento de golpe de Estado que tuvo lugar en julio de 2016. El líder musulmán, que lleva en exilio voluntario en Estados Unidos desde 1999, ha negado cualquier tipo de implicación.
"Lo que ha ocurrido hoy es una vergüenza en el nombre de la democracia", ha denunciado Kilicdaroglu, presidente del principal partido opositor, el Partido Republicano del Pueblo(CHP).
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha adoptado una retórica mucho mas dura contra Kilicdaroglu en los últimos meses, acusándole a él y al CHP de estar vinculados con la red de Gulen, a la que califica de "organización terrorista".
Haciendo uso del acrónimo que utiliza Erdogan para hacer referencia a la organización de Gulen, FETO, Kilicdaroglu ha asegurado en una entrevista con la CNN turca que el Gobierno está "apoyando a la FETO fingiendo llevar a cabo una campaña de lucha contra la FETO".
El portavoz del CHP, Bulent Tezcan, ha dicho que el arresto de Celik forma parte de una conspiración contra su partido. "Celik había dimitido de su puesto como juez en el Tribunal de Apelaciones para luchar contra FETO cuando era más poderosa. Si la casa de Celik puede ser registrada, entonces el mundo debe saber que cualquier persona puede ser víctima de lo mismo", ha asegurado.
Alrededor de 50.000 personas han sido detenidas y unas 150.000, incluidos periodistas y miembros de la oposición, han sido cesadas de sus trabajos desde la intentona golpista de julio de 2016 por sus presuntos vínculos con Gulen.