PARÍS, 31 Oct. (EUROPA PRESS/Javier Gómez Muñoz) -
El primer ministro francés, Dominique de Villepin, declaró hoy que los cinco menores detenidos esta mañana en Marsella por su relación con el incendio de un autobús el pasado sábado, con todos los pasajeros dentro, son los "presuntos autores" del crimen.
"La prioridad es la detención (de los culpables). Y los presuntos autores han sido arrestados esta mañana en Marsella", afirmó Villepin, en la sesión de control al Gobierno celebrada en la Asamblea Nacional. Finalmente, dos de los cinco apresados tienen poco más de 15 años, y los tres restantes, 17.
Todos fueron detenidos en sus domicilios esta mañana, por los "testimonios" recabados por la Policía entre los pasajeros del autobús y los habitantes del barrio, según explicó el fiscal de Marsella, Jacques Beaume. Todos constaban ya en los registros policiales, a pesar de su corta edad, por diferentes motivos, uno de ellos de gravedad, aunque el fiscal no ofreció más detalles.
El fiscal explicó que los agresores ya provocaron un pequeño altercado en el primer paso del autobús por la parada, "unos minutos antes del crimen". "La convicción de la conductora es que eran los mismos, lo que significaría una preparación" del atentado, añadió Beaume.
Los cinco jóvenes, de probarse su culpabilidad, podrían enfrentarse a penas de 30 años de reclusión e incluso de cadena perpetua si la joven herida falleciese con motivo de las heridas que le causó el siniestro. El diario 'Le Parisien' afirma hoy que las cámaras de vigilancia del autobús filmaron a los agresores, por lo que la policía contaría con pruebas suficientes para poder identificarlos.
Mama Galledou, la joven senegalesa de 26 años que no pudo escapar a tiempo del autobús en llamas, se debate todavía entre la vida y la muerte con quemaduras en el 62 por ciento de su cuerpo. Su pronóstico vital es reservado y se encuentra en coma artificial con asistencia respiratoria.
