LOGROÑO, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los alojamientos municipales para temporeros han acogido en la presente campaña, que se cierra este viernes, a cerca de 400 personas, según los datos facilitados por la concejala de Derechos Sociales, Pilar Criado, quien ha destacado que "no se ha producido ningún incidente".
Criado ha apuntado que la campaña se inició el pasado día 15 de septiembre "y se finalizará mañana, porque hay que ponerle una fecha, que no se demore en el tiempo, y, además, la vendimia ya casi está finalizando".
Se ha dispuesto de tres recursos de acogida, que han sumado más de 180 plazas: el Centro Municipal de Acogida, en la calle Herrerías, durante todo el mes; el polideportivo del Colegio Espartero, cercano a la estación de autobuses, desde el 27 de septiembre; y, para casos más concretos, "de transeúntes más conocidos", el centro Alasca, con 14 plazas.
En una primera fase de la campaña, a partir del 15 de septiembre, se abrió exclusivamente el Centro de Acogida, desde donde, según ha explicado la edil, "se iba informando a las personas que llegaban a Logroño de los contactos necesarios para poder trabajar en la vendimia".
Se trató, en general, de casos con alojamiento para dos o tres días, además de manutención, antes de que estas personas se trasladaran a los lugares de trabajo. La capacidad del Centro de Acogida, con 49 plazas, "no estuvo a tope en esta primera fase".
La segunda fase se abrió una vez pasadas las fiestas de San Mateo, "para que no usaran los alojamientos gente que viniera sólo para los festejos". Ya se abrió el polideportivo y el centro de información en la estación de autobuses y se contó con el apoyo del personal de Cáritas, Cruz Roja y de los sindicatos.
De este modo, se establecieron contactos "sobre todo en la zona de La Rioja Baja, Alfaro y Arnedo, donde nos fue bastante fácil", mientras que, en el caso de La Rioja Alta, Criado ha dicho que "las comunicaciones fueron algo más dificultosas". De cualquier modo, "se registró un importante incremento en el número de personas".
Así, si bien la media de ocupación del polideportivo Espartero -con un total de 120 plazas- fue de 80 ó 90 personas por día, "sí que hubo bastantes días en el que estuvo todo lleno". A ello hay que sumar, en muchos casos, los vales de comedor para la Cocina Económica que se fueron suministrando a muchos alojados.
Por último, en la tercera fase, la actual, se cuenta de nuevo sólo con el Centro de Acogida y se informa a los trabajadores "de dónde tienen posibles trabajos, en otras campañas como la de la oliva", para lo que se está en contacto directo con otras comunidades, como Andalucía.
En total, Criado ha subrayado que han participado recursos municipales "contando, por ejemplo, con más personal contratado para atender el polideportivo".
Además, se ha contado igualmente con Cáritas Rioja "que ha tenido informadores por la ciudad", Cruz Roja para atención directa, ATIM con su punto de información, Cocina Económica y Banco de Alimentos, o la ayuda "inestimable" de cinco miembros de la Iglesia de los Apóstoles de los Últimos Días "que han ayudado por la noche y en el reparto de desayunos y de kits higiénicos por la mañana".
En total, en cuanto a cifras, la concejala ha detallado que las entre 380 a 400 personas que han pasado por los centros de acogida, han realizado 2.547 alojamientos -1.000 en el Centro Municipal, y 1.547 en el polideportivo-, mientras que se han entregado 2.500 vales de comida.
El presupuesto de la campaña "entre personal contratado y los vales de la comida, que al Ayuntamiento nos cuestan con la Cocina Económica 5,26 euros por ración", ha sido de unos 50.000 euros en conjunto.
