Condenado a dos años de prisión un ciudadano rumano por herir a otro compatriota en la cara y un brazo con una botella

Europa Press La Rioja
Actualizado: jueves, 15 octubre 2009 19:11

LOGROÑO 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Logroño ha condenado a dos años de prisión a un ciudadano rumano como autor de un delito de lesiones, después de que, en el transcurso de una discusión en un bar de Haro, hiriera a otro compatriota en la cara y en el brazo derecho con una botella de cerveza.

En la sentencia se relata que los hechos, ocurridos el 6 de abril del año 2007, sucedieron en el bar 'Los Riscos' de la localidad jarrera, donde el condenado, N.L.S., de 28 años, se encontraba sentado junto con otras personas, familiares y amigos, "cuando algunas personas de su misma nacionalidad comenzaron a hablar mal de él".

Por ello, se entabló una discusión entre el joven y su compatriota L.B.. En el transcurso de la disputa, N.L.S. tomó de la mesa una botella de cerveza y golpeó con ella a su oponente en la cabeza "causándole lesiones consistentes en heridas inciso contusas en la región frontal derecha y en la cara anterior del antebrazo derecho".

Estas heridas precisaron de tratamiento "consistente en aplicación de sutura en tres de las heridas, además de profilaxis antitetánica, tardando en curar 10 días", de los que dos estuvo incapacitado. Le restan, además, como secuelas, una cicatriz en la región frontal derecha y varias cicatrices en la cara anterior del antebrazo derecho "con el consiguiente perjuicio estético".

En el momento del juicio, el Fiscal solicitó un total de tres años de prisión para el acusado, por un delito de lesiones, mientras que la defensa reclamó la libre absolución. El perjudicado renunció a percibir la indemnización que pudiera corresponderle.

En los fundamentos de derecho, la sentencia reconoce que los hechos que se declaran probados constituyen un delito de lesiones "causadas con un medio peligroso". Indica que, desde su primera declaración, el acusado reconoció haber golpeado al otro joven con la botella "aunque pretende que lo hizo sin saber porqué o porque tuvo miedo de ser agredido, y que la agresión se produjo tras ser insultado y provocado por el perjudicado y otras personas que estaban con él", una situación "tensa" que corroboró L.B.

En el fallo se destaca que "el acusado utilizó un elemento contundente, susceptible de causar lesiones que, en consonancia con la forma de uso, pudieran ser de graves consecuencias, no sólo causante de las heridas sufridas, sino que, con la fractura de la botella se originó un grave riesgo por tratarse de un instrumento susceptible de causar unas lesiones de entidad superior a las de posible causación por medios o procedimientos diversos al realmente empleado".

Por otro lado, y frente a la reclamación de la víctima de que las secuelas, en forma de cicatrices, que le han quedado, puedan ser consideradas una deformidad, el fallo desestima esta declaración, ya que se apoya en el informe de la médico forense, que señala que el perjuicio estético por las cicatrices es de ligero a moderado, y en la propia percepción visual en el momento del juicio, que ven "ligeras".

Por ello, considera que procede imponer al acusado N.L.S. una pena de dos años de prisión. Contra la sentencia se puede interponer recurso de casación ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo en el plazo de cinco días a contar desde la última notificación.

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