LOGROÑO, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno regional, Pedro Sanz, colocó hoy en Igea la primera piedra del edificio que acogerá un hogar para personas mayores y una sala cultural, cuya construcción supondrá una inversión de 801.386,65 euros financiados por las Consejerías de Servicios Sociales y de Educación, Cultura y Deporte.
El centro se construirá en unos terrenos, de 224 metros cuadrados, que ha aportado el Ayuntamiento de Igea y están situados en la Plaza Mayor s/n, donde se encontraban las Antiguas Escuelas Públicas.
El edificio constará de un sótano destinado a los servicios complementarios (aseos, cuarto maquinaria ascensor, instalaciones generales); plantas baja y primera, donde se ubicarán las dependencias del Hogar de Personas Mayores; una segunda planta diáfana, que se destinará a usos culturales y juveniles y, finalmente, la entrecubierta con acceso a la terraza.
El Hogar de Personas Mayores contará con las siguientes dependencias en la planta baja: vestíbulo principal de acceso, salón, cafetería-comedor, cocina, oficina, aseos adaptados y terraza cubierta. En la segunda planta se habilitarán un salón polivalente, 3 salas desmontables, aseos adaptados y la sala de podología.
La colaboración financiera entre el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Igea se ha articulado en un convenio de colaboración, que establece una aportación de la Consejería de Servicios Sociales del 60 por ciento del coste de la obra, es decir 480.831,99 euros plurianualizados en los ejercicios 2008 y 2009 (141.565,60 euros en 2008 y 339.266,39 euros en 2009). Asimismo, la Consejería de Educación, Cultura y Deporte financiará el 40 por ciento restante con una aportación máxima de 320.554,66 euros (60.000 euros en 2008 y 260.554,66 en 2009).
Por su parte, el Ayuntamiento de Igea se encargará de licitar las obras y pagar el proyecto, así como de la dirección de obra y de cuantas actuaciones adicionales sean precisas para la apertura del centro. Además, el Ayuntamiento asumirá la gestión del centro y deberá ponerlo en funcionamiento en un plazo máximo de seis meses desde la finalización de las obras, debiendo mantener el destino finalista de la inversión durante un período mínimo de quince años.
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