MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Madrid contará el próximo año con tan solo 3 millones de euros para inversión de obra nueva, algunas de las cuales se cofinanciarán con fondos procedentes de la Unión Europea, según recoge el proyecto de presupuestos municipales presentado este martes por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y el delegado de Hacienda, Juan Bravo.
Así, de los 224,1 millones de euros que el Consistorio y sus organismos autónomos destinarán a inversiones reales en el próximo ejercicio (un 19,86 por ciento menos que este año y un 72,09 por ciento menos que en 2008) sólo 71,6 millones (el 32 por ciento) se destinarán a obra nueva.
De ellos, tres millones corresponden a obras que se iniciarán en el año 2012 (un uno por ciento), y el resto son créditos para atender los proyectos que ya están en curso y para inversión de reposición. Además, 560.000 euros de esa cantidad están cofinanciados por fondos europeos para la construcción de la escuela infantil de Butarque en Villaverde.
Además, 340.000 euros se corresponden a actuaciones de promoción económica y empleo, entre las que destaca el inicio de la construcción de la segunda Factoría Industrial de Madrid Emprende, y el programa electoral prevé también otras inversiones para este ejercicio como la construcción de un carril bici Atocha-Mayor-Alcalá, por otros 550.000 euros, o la ampliación de la Biblioteca Municipal de Orcasitas, por 500.000 euros.
Por otra parte, el Plan Económico Financiero (PEF) elaborado por el Consistorio prevé una inversión estable de 200 millones de euros anuales entre 2012 y 2016 que permitirá financiar "otros proyectos del programa electoral", según Bravo.
De hecho, en la documentación aportada junto con el proyecto de presupuestos se especifica que, de producirse un mayor ahorro en las cuentas municipales, ese dinero iría destinado primero al pago a proveedores y, después, a políticas de apoyo a los emprendedores tales como inversiones en polígonos industriales.
Las prioridades pasarían después por la ampliación de las políticas de rehabilitación de vivienda y de entornos especialmente degradados, que requerirían unos 60 millones anuales; por la ejecución del nuevo mercado de La Cebada y su polideportivo con piscina; por la mejora de la accesibilidad de la ciudad, y por la puesta en marcha del proyecto de alquiler de bicicletas 'Mybici'.
GASTO CORRIENTE
Sin embargo, la realidad es que más de la mitad del presupuesto municipal está condicionado por las necesidades del capítulo 1 (personal), que copa el 28,78 por ciento de los ingresos; y por los gastos corrientes en bienes y servicios, que suponen otro 37,91 por ciento.
En este sentido, Bravo ha afirmado que estas cuentas "tocan suelo en volumen de gasto", aunque ha matizado a renglón seguido que a partir de 2015 podría haber cierto margen de maniobra, ya que hasta entonces hay que afrontar un volumen de vencimientos de deuda superior a los previstos en años siguientes como consecuencia de las obligaciones fijadas por el Ejecutivo central.
Así, a partir del año 2015 "podrían reducirse los créditos presupuestarios en el mismo importe en el que lo hagan las necesidades de amortización, sin que con ello se viesen afectados los actuales niveles de prestación de servicio", ya que el Consistorio dispondría de ingresos corrientes ordinarios suficientes para hacer frente al total de sus obligaciones, quedando libres los ingresos extraordinarios (venta de suelo, de activos...).
En cualquier caso, los recortes introducidos desde 2008 hacen que "el recorrido para minorar el presupuesto sea cada vez menor, aunque aún podrían realizarse algunos ajustes sin que por ello se viera comprometida la calidad de los servicios" ya que "algunas de las operaciones puestas en marcha generarán mayores ahorros en ejercicios futuros".
MÁS AHORRO, MENOS GASTO
Entre las medidas que han permitido ese ahorro se cuentan la reducción del 15,9 por ciento (desde 2008) en el gasto corriente, del 6,84 por ciento en las nóminas de personal o del 53,9 por ciento en los gastos de funcionamiento (vehículos, alquileres, etc), destacando en esta partida las caídas del 23,3 por ciento en los gastos representativos, del 81,9 por ciento en publicidad o del 43,5 por ciento en prensa, revistas y publicaciones.
Además, ciertas operaciones han permitido también registrar ahorros en las cuentas municipales. Es el caso de la surrogación de la deuda de Madrid Calle 30 dentro de la unidad central, que permitirá ahorrar 90 millones al año; o la cesión de las acciones de Metro a la Comunidad de Madrid, que permitirá dejar de transferir 159,1 millones al Consorcio Regional de Transportes.
Asimismo, la revisión de más de un centenar de contratos municipales también ha permitido un ahorro de unos 700 millones de euros al año, y con la introducción de un nuevo sistema más inteligente de gestión de los servicios públicos se podría llegar a ahorrar otros cien millones más en cada ejercicio, cuando se ponga en marcha en 2014 una vez vayan venciendo los actuales contratos.
Así las cosas, el presupuesto de la capital para el año próximo permite contemplar aportaciones para poner en marcha 16 nuevos equipamientos que ya estaban construidos pero que no funcionaban.
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