Al banquillo un presunto proxeneta para el que Fiscalía pide 16 años de cárcel acusado de prostituir a una nigeriana

"La pegaban y amenazaban diciéndole que si la mataban nadie preguntaría por ella", explica el fiscal

Mesa de acusado, acusados, micrófono de acusado, sala de vistas, sala de juicios
EUROPA PRESS
Europa Press Madrid
Actualizado: viernes, 17 noviembre 2017 6:53

MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Madrid celebra el próximo viernes, 17 de noviembre, a partir de las 10 horas, la vista oral del juicio contra Blessing O.A., acusado de traer a una mujer desde Nigeria para obligarla a prostituirse.

Por los hechos, la Fiscalía le solicita una pena de 16 años y tres meses de cárcel por la presunta comisión de los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, contra los derechos de los trabajadores extranjeros, falsedad y detención ilegal.

El procesado, de acuerdo con el escrito de acusación del fiscal, se sienta en el banquillo por unos hechos que se remontan a junio de 2001, cuando contactó en Nigeria con la presunta víctima, en la actualidad testigo protegida, a la que ofreció la posibilidad de viajar a España para trabajar en algo relacionado con los estudios que acababa de terminar.

"En realidad, él y su mujer -que ya ha sido juzgada por estos delitos-, lo que pretendían era que ejerciera la prostitución y se lucraran con los beneficios que obtuviera de esa práctica", explica el fiscal.

La víctima, una vez que accedió a un centro de culto en Nigeria donde tuvo que jurar que devolvería la deuda contraída por los gastos del viaje, fue recogida por el acusado al llegar a Madrid y la condujo a su domicilio. Allí, le quitaron el teléfono móvil, sus escasas pertenecias y la encerraron.

Cuando la chica se negaba a ejercer la prostitución, "la pegaban y amenazaban diciéndole que si la mataban nadie preguntaría por ella", cuenta el fiscal, para añadir que "sólo podía salir para ir a misa bajo su estrecha vigilancia".

Más tarde, el procesado decidió enviarla a Dinamarca sirviéndose de un pasaporte falso y la embarcó en un vuelo con destino a Ámsterdam. En el avión, la víctima sufrió un ataque de pánico que motivó la intervención de la fuerza pública y su ingreso en un centro médico, donde le diagnosticaron un cuadro de grave daño moral y psicológico con reacciones físicas y emocionales muy bruscas.

Últimas noticias sobre estos temas

Contenido patrocinado