MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Casa de Campo de Madrid tendrá 25.000 encinas más, seis kilómetros menos de carreteras y ocho nuevas barreras electrónicas para controlar los accesos antes de final de año, cuando se terminen las cuatro acciones del Plan Director del parque previstas para este ejercicio y financiadas con 4,2 millones de euros procedentes del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL) del Gobierno central.
Así lo aseguró esta mañana el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, durante una visita al emblemático parque, que ocupa 1.722 hectáreas en el distrito de Moncloa-Aravaca. Acompañado por la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, el primer edil aseguró que el Consistorio está trabajando por "recuperar el carácter original del patrimonio verde del pulmón de la ciudad".
Así, las cuatro actuaciones se encuentran ya ejecutadas al 90 por ciento, a falta de tres meses para que finalice el plazo previsto. En concreto, consisten, por una parte, en recuperar cerca de seis kilómetros de antiguas carreteras de asfalto, lo que "simboliza un punto de inflexión en los usos del parque" después de que el Gobierno local decretara en 2007 la prohibición de circular por su interior excepto a vehículos de mantenimiento y emergencias.
Estos trabajos afectan a tramos de calzadas de Somosaguas y Ciudad Universitaria, en el Camino de los Romeros y en el aparcamiento cercano al Metro de Batán. Al mismo tiempo, se conservará un tramo de la carretera del Repartidor, de 1938, por su valor histórico vinculado a la Guerra Civil Española, ya que en su pavimento de hormigón hay grabadas diferentes inscripciones de la contienda.
En concreto, se ha sustituido el pavimento asfáltico por otro que se integra en el entorno lo máximo posible, demoliendo la calzada existente por medios mecánicos, retirando los escombros a un vertedero, y sustituyéndolo por otro pavimento de zahorra con una tonalidad similar a la del terreno circundante.
Por otra parte, se sustituirán ocho cadenas por sendas barreras electrónicas para controlar los accesos a las zonas restringidas al tráfico. Son las ubicadas en la entrada norte al Reservado, la del Paseo Principal desde la Glorieta de Cubas, las de los paseos de los Castaños y de Plátanos desde el aparcamiento de Patines, la de Puente de Hierro a la carretera del Parque de Atracciones, y la de la carretera del Zarzón desde el Zoológico.
Las barreras instaladas son de aluminio de seis metros de brazo, e incluyen un soporte con botón de llamada a los receptores automáticos de las instalaciones municipales, lo que permite comunicarse por voz y abrir automáticamente los accesos mediante un sistema de radio.
TRATAMIENTO SEVÍCOLA
La tercera de las intervenciones previstas para 2009 es la de regeneración y mejora de la masa forestal del parque. Los trabajos incluyen tratamientos sevícolas o labores de poda en 242 hectáreas de pinares y encinas. Para ello, la empresa adjudicataria utiliza mulas que cargan con los troncos de los árboles desbrozados, fundamentalmente arizónicas que aumentan la acidez del terreno, para arrastrarlos hasta la máquina de triturar.
Los troncos más gordos son llevados a la planta de Migas Calientes y se convierten en compost para uso interno del Ayuntamiento, tanto en la propia Casa de Campo como para abonar el resto de parques y jardines del municipio.
Estos trabajos se completarán con la plantación, desde últimos de octubre y principios de noviembre principalmente, de 25.000 encinas, "una especie autóctona acorde con el parque y que, aunque crece lentamente, no es negativa para el suelo", subrayó Gallardón, quien plantó un ejemplar ayudado por Botella.
La última intervención es la rehabilitación del muro perimetral de la zona. Tras la recuperación de 1,2 kilómetros entre 2002 y 2006, ahora se está trabajando en otros 700 metros repartidos entre los límites con Pozuelo de Alarcón y con las carreteras de Boadilla del Monte y Castilla, donde se encuentra el acceso a la carretera de Ciudad Universitaria.
Los trabajos, ya casi concluidos, han consistido en la restauración o la nueva construcción del vallado, respetando su aspecto original. Este muro histórico, que fue muy dañado durante la Guerra Civil, sigue el trazado de Carlos III del siglo XVIII, que incorpora las últimas adquisiciones del Real Sitio --la Casa de Campo no fue cedida al Ayuntamiento hasta 1931--.
PATRIMONIO VERDE
"Madrid continúa trabajando. Nosotros continuamos con nuestro compromiso de hacer de la ciudad un lugar mejor para la convivencia y más sostenible", aseguró Gallardón al comenzar su intervención, la primera tras la decisión del Comité Olímpico Internacional (COI) el pasado viernes de dar a Río de Janeiro la organización de los Juegos de 2016 en detrimento de la capital española.
A continuación, el primer edil recordó que, desde 2003, cuando él llegó a la Alcaldía de la ciudad, se han plantado más de 570.000 árboles y se han creado más de 878 hectáreas de zonas verdes municipales.
"En este momento, Madrid cuenta con 21.000 hectáreas de zonas verdes de las que 5.700 son de conservación municipal, y con 300.000 árboles de alineación, lo que la convierten en una de las ciudades más arboladas del mundo, lo que permite absorber 36.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2) anualmente", apostilló.
Por último, recordó que la intención del Ejecutivo local es "aumentar sustancialmente ese patrimonio verde" y que su objetivo es "cumplir con el compromiso de la palabra dada a los madrileños de no descansar en la mejora de la Casa de Campo, poniendo el parque siempre a su disposición".
Por su parte, Botella destacó que este espacio "necesita una protección especial para su uso sostenible" por le alto valor "histórico, ambiental y afectivo" de la zona. De hecho, según la delegada este compromiso municipal se manifiesta en decisiones como el soterramiento de parque de la Avenida de Portugal, el cierre al tráfico de la zona o el Plan Director 2007-2011.