MADRID, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos CC.OO. Madrid y UGT Madrid han criticado este jueves que la embotelladora Coca-Cola Iberian Partners haya anunciado la reapertura de la planta de Fuenlabrada el 7 de septiembre, al considerar que siguen sin cumplir la sentencia ratificada por el Tribunal Supremo que declaraba nulo el Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
En declaraciones a Europa Press, el portavoz de CC.OO. en la planta, Juan Carlos Asenjo, ha insistido en que la readmisión que propone la empresa es una "readmisión irregular" que no se ajusta a la sentencia "ni en tiempo ni en forma", ya que no se ha readmitido a los trabajadores en tres días ni tampoco en los puestos de trabajo que tenían anteriormente.
En este sentido, ha apuntado que más de un centenar de trabajadores están a expensas de la vista oral en la Audiencia Nacional, prevista para el 10 de septiembre, donde se tendrá que resolver si la readmisión propuesta por la embotelladora es "regular o irregular".
Así, ha augurado que los 85 trabajadores ya readmitidos por la compañía son "casi en su totalidad trabajadores de logística, de mantenimiento", mientras que la empresa está "retrasando la actividad industrial y la producción de las líneas" con la "intencionalidad clara" de esperar a la decisión de la Audiencia Nacional.
En este punto, ha afirmado que diariamente acuden "tres o cuatro trabajadores externos de mantenimiento" a la planta fuenlabreña, cuando, para poder poner en marcha la instalación con sus anteriores funciones productivas, "tendrían que entrar 30 o 40 trabajadores".
Asenjo también ha criticado las jornadas formativas que los empleados están recibiendo por parte de la empresa, que "estarían bien para recibirlas en una situación ordinaria" pero no en una situación que "no es óptima" al no ajustarse al auto de la Audiencia Nacional.
En la misma línea se ha pronunciado el portavoz de UGT Madrid, José María González, quien, en declaraciones a Europa Press, ha afirmado que seguirán "luchando para que la planta se abra como centro productivo" y no como centro logístico. González ha apuntado que el conflicto está "cada día más liado" y que "tampoco la empresa sabe a ciencia cierta lo que quiere o no quiere", ha concluido.