MADRID 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi Comunidad de Madrid) ha reivindicado, con motivo de la celebración del 8 de Marzo --Día Internacional de la Mujer Trabajadora--, una mayor atención a las necesidades de las mujeres con discapacidad de avanzada edad, y ha insistido en la formación de las nuevas tecnologías y redes sociales a través de mecanismos y fórmulas que les permitan el acceso adecuado a dichos soportes.
Según ha informado Cermi mediante un comunicado, se debe garantizar la capacidad de elección y el planteamiento de nuevas funciones para el sector. De esta forma, el Comité busca reforzar la sensibilización que sobre este colectivo se está intentando potenciar en el Año Europeo del Envejecimiento Activo y de la Solidaridad Intergeneracional, en el que se reafirma que el género y la edad son aspectos que junto a la discapacidad limitan a las mujeres con discapacidad, de forma constatable, el acceso a bienes, servicios y oportunidades fundamentales para su vida diaria.
Para ello, CERMI Comunidad de Madrid cuenta en su seno con una Comisión de trabajo de Mujer en la que están representadas las principales organizaciones del tejido asociativo madrileño, y que trabaja en el análisis de la realidad.
EL COMITÉ REPRESENTA A MÁS DE 450.000 PERSONAS CON DISCAPACIDAD EN MADRID
El Cermi-Comunidad de Madrid representa a más de 450.000 personas con discapacidad que, conscientes de su situación, deciden unirse a través de las organizaciones más representativas de la Comunidad de Madrid en las que se agrupan, para avanzar en el reconocimiento de sus derechos y alcanzar la plena ciudadanía en igualdad de derechos y oportunidades con el resto de componentes de la sociedad.
Entre las principales reclamaciones de esta comisión de trabajo, en absoluta sintonía con el CERMI Estatal, se encuentra la creación de una renta de garantía mínima que cubra las necesidades básicas de la persona con discapacidad en proceso de envejecimiento, teniendo en cuenta la perspectiva de género, potenciar la participación activa de las mujeres con discapacidad y garantizar que el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) atienda las necesidades de las personas con discapacidad mayores de acuerdo a sus características específicas, con especial atención a las mujeres con discapacidad mayores.
Además, ha considerado necesario incorporar la perspectiva de género en todas las actuaciones, teniendo en consideración el contenido del segundo Manifiesto de las mujeres y niñas con discapacidad de la Unión Europea.
También, ha destacado que se deben plantear medidas específicas dirigidas a las mujeres con discapacidad mayores residentes en el medio rural, garantizar su inclusión y participación en el acceso a los bienes culturales y a las nuevas tecnologías, en igualdad de condiciones con las demás personas, y velar por que puedan desarrollar y utilizar su potencial creativo, artístico e intelectual.
El Comité madrileño ha asegurado que "el género, sumado a la edad y a la discapacidad, continúan siendo factores relevantes de desigualdad y por ello se debe prestar atención a las necesidades y demandas de las mujeres mayores con discapacidad". "Además, Es imprescindible impulsar el reconocimiento de la contribución de estas personas en los trabajos no remunerados del sector informal y en los cuidados domésticos", ha proseguido.
"Tanto hay que olvidar que los procesos de envejecimiento afectan tanto a la persona como a su familia. Y es que las personas con discapacidad en proceso de envejecimiento, a menudo reciben apoyos de sus familiares, que a su vez son también personas mayores y en la mayor parte de los casos mujeres. Esto incrementa la vulnerabilidad de las familias y las necesidades generales de apoyo del núcleo familiar en su totalidad", ha concluido.