Cooperativistas del sureste se concentrarán el jueves ante Plaza Castilla, donde harán una performance de su situación

Actualizado: lunes, 10 mayo 2010 13:51

MADRID, 10 May. (EUROPA PRESS) -

Cooperativistas del sureste de Madrid procedentes de Los Ahijones, Los Berrocales, Los Cerros y El Cañaveral se concentrarán el jueves ante los juzgados de Plaza Castilla, donde harán una performance de su situación.

Allí, con jueces, fiscales, secretarios judiciales e imputados simulados darán a conocer a la ciudadanía la "presunta estafa" que dicen sufrir y por la que unas 1.500 familias podrían haber perdido hasta 200 millones de euros.

Y es que los afectados han desembolsado cantidades que van desde los 40.000 hasta los 200.000 euros, unas cifras que consideran parte de la "estafa" de la gestora Ofigevi. El caso de los aproximadamente 15.000 afectados del sureste viene de largo, concretamente de finales de los años 90, cuando la promotora Ofigevi inició decenas de proyectos de urbanización a través de sus correspondientes cooperativistas.

La Justicia es el recurso en el que ahora tienen puestas todas sus esperanzas después de haber pedido ayuda a las administraciones. De hecho, éstas sólo pueden tomar cartas en el asunto cuando se denuncia ante los tribunales y siempre que se trate de vivienda protegida. No es éste el caso de los denunciantes ya que, como apuntaron las mismas fuentes, aún no se ha adjudicado vivienda alguna en los desarrollos del sureste.

Los denunciantes ya explicaron meses atrás que el 'modus operandi' de la gestora pasa por constituir una cooperativa en la que los socios aportan fondos. "Cuando había un importante número de ellos, con parte del dinero aportado, cobraban terrenos que en un futuro podrían ser edificables aunque cuando eran adquiridos no contaban con los permisos para ello", explicaron.

"Entre la adquisición de esos terrenos y la aprobación de los nuevos desarrollos que los hicieran urbanizables se producía un tiempo de demora considerable, por lo que Ofigevi no podía financiarse con la construcción de los edificios y la necesidad de liquidez la subsanaba abriendo otras promociones de cooperativas con el mismo procedimiento. Llegó a tener más de 12.000 cooperativistas en espera de sus viviendas", aseguran.

Llegó la crisis inmobiliaria y con ella la desaparición, como aseguran, del dinero de los cooperativistas, "esfumado con la compra de nuevos terrenos para nuevas promociones". Los afectados, viendo que no había capital para iniciar las obras empezaron a hablar de una "posible estafa".