Las cuencas de los ríos Alberche y Cofio, declaradas el espacio natural protegido más grande de la región

Un imagen de las cuencas
COMUNIDAD DE MADRID/EP
Actualizado: miércoles, 22 septiembre 2010 20:18

MADRID, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid ha declarado las cuencas de los ríos Alberche y Cofio Zona Especial de Conservación (ZEC) y Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y ha aprobado el Plan de Gestión del Espacio Protegido Red Natura 2000 denominado 'Cuencas y Encinares de los ríos Alberche y Cofio'.

Dicho espacio natural protegido cuenta con una extensión de 83.089 hectáreas y está situado al suroeste de la Comunidad de Madrid, siendo el espacio protegido más grande de la región, puesto que supone el 10 por ciento de su superficie total.

El decreto de declaración, aprobado el pasado 1 de julio por el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, ha sido finalmente publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (Bocam) el pasado 10 de septiembre.

El decreto fija las medidas de conservación necesarias, que implicarán fórmulas reglamentarias, administrativas o contractuales, asegurando su inclusión en planes o instrumentos adecuados, que responde a las exigencias ecológicas de los tipos de hábitat naturales y de las especies presentes en tales áreas.

Según el decreto regional, la elaboración del Plan de Gestión de ambos ríos se ha visto favorecida por una amplia participación pública en los trámites de información pública y audiencia a los interesados, "que evidencia el creciente interés por la conservación de la naturaleza, contribuyendo a perfeccionar el texto definitivo, sin que se haya alterado de modo sustancial su contenido".

El Plan finalmente ha quedado estructurado en dos partes, una relativa a los antecedentes y la normativa general y administrativa para todo el ámbito, y una segunda de anexos que incluye directrices, recomendaciones, orientaciones, buenas prácticas y seguimiento; zonificación; directrices de gestión; seguimiento y evaluación del plan; descripción y valoración del espacio protegido; educación ambiental; cartografía incluyendo los límites y zonificación; y valoración económica por lo establecido en aquellos.

AFECTA A 19 MUNICIPIOS

El Plan de Gestión ordena el territorio madrileño que limita al oeste con Ávila y al sur con Toledo. También engloba el tramo medio del río Alberche e incluye seis embalses, entre los que destacan el de San Juan y Picadas, y el río Cofio.

Además, afecta a 19 municipios. Entre ellos se encuentran las ciudades de Aldea del Fresno, Cenicientos, Colmenar del Arroyo, Chapinería, Fresnedillas de la Oliva, Navalagamella, Navas del Rey, Pelayos de la Presa, Sevilla la Nueva, Valdemaqueda, Villamantilla y Villanueva de Perales.

El Plan también afectará, pero de modo parcial, a los municipios de Cadalso de los Vidrios (81 por ciento), Quijorna (37 por ciento), Robledo de Chavela (81 por ciento), Rozas de Puerto Real (82 por ciento), San Martín de Valdeiglesias (87 por ciento), Valdemorillo (19 por ciento) y Villa del Prado (95 por ciento).

De este modo, el Gobierno regional cumple con las exigencias de las Directivas Europeas de Aves y Hábitats transpuestas en la Ley estatal 42/2007 de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, algo que era necesario hacer antes de 2012.

TRES ÁREAS DE PROTECCIÓN

En concreto, el Plan distingue tres zonas: la Zona de Conservación Prioritaria (27.300 hectáreas), la Zona de Protección y Mantenimiento de Usos Tradicionales (47.300 hectáreas) y la Zona de Uso General (7.700 hectáreas).

La Zona de Conservación Prioritaria se caracteriza por sus excepcionales valores ecológicos, paisajísticos y científicos, mientras que la zona de Protección y Mantenimiento de Usos Tradicionales ha albergado actividades compatibles con la conservación del medio natural, como la ganadería, la agricultura o el ecoturismo.

En este espacio se incluyen las masas forestales, los montes preservados de utilidad pública, las dehesas y las zonas agropecuarias de carácter tradicional que han creado paisajes agrarios que definen esta área.

La tercera zona, de uso general, podrá acoger usos relacionados con la promoción del desarrollo sostenible y con la conservación medioambiental y de los recursos naturales. También podrá incluir actividades industriales que sean compatibles con la preservación del medio ambiente y usos adecuados para el desarrollo rural.

QUEJAS POR FALTA DE PERSONAL DE VIGILANCIA

Por su parte, la Asociación Profesional de la Comunidad de Madrid (APAF-Madrid) ha denunciado la falta de personal, ya que aseguran que tan sólo 26 agentes forestales tienen que vigilar 83.089 hectáreas de espacio natural protegido. Además, esperan que dicha inversión en vigilancia ambiental recaiga sobre los verdaderos especialistas en la materia.

"La labor de los agentes forestales de la Comunidad de Madrid es fundamental, pues sin vigilancia en el campo, los usos y actividades incompatibles con el espacio natural protegido se desarrollarían sin control. Además los agentes forestales son la cara visible de la Administración y conocen la realidad física, biológica y social de la zona", señala la asociación.

Por este motivo, afirman que el Plan de Gestión recoge que se deberá invertir en vigilancia ambiental en la zona, especialmente, la vigilancia con objeto de evitar la caza furtiva, el expolio de nidos, utilización de venenos, cepos, lazos o cualquier tipo de trampa no autorizada.