Enrique Barón dirigirá en exclusiva toda la política de seguridad de la Comunidad

Actualizado: jueves, 16 julio 2009 18:18

MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó hoy un Decreto por que se aprueba la nueva estructura y competencias de la Dirección General de Seguridad e Interior que dependerá exclusivamente de Enrique Barón, hasta el año pasado jefe superior de Policía de Madrid.

El consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, anunció que, con esta reforma, "toda la política de seguridad dependerá en exclusiva de Enrique Barón". "Es un compromiso adquirido por mí mismo en sede parlamentaria hace unos meses y es el resultado del nuevo modelo en el que Barón trabaja desde que fue contratado como director general", indicó.

"Todas las competencias en materia de seguridad pasan a depender del director general, de modo que no habrá ninguna actividad de seguridad que no dependa del director general", explicó Granados, que especificó que habrá tres subdirecciones generales: Seguridad Operativa, Gestión Administrativa y Política Interior.

También pasa bajo el mando de Barón el cuerpo de agentes forestales, que hasta ahora dependía de Medio Ambiente en sus labores de policía medioambiental, así como la futura unidad adscrita del Cuerpo Nacional de Policía. De hecho, la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, firmará en los próximos días el convenio por el cual se unirá a la Comunidad una unidad adscrita a la Policía nacional para realizar labores de seguridad, incluidas las que hacían hasta ahora los técnicos de seguridad; así como una unidad de seguridad de edificios que lleva a cabo la Guardia Civil.

Por otra parte, se crea un Comité de Dirección de Seguridad para coordinar toda la política de seguridad de la Comunidad de Madrid y de sus entes y empresas como el Canal Isabel II o el Metro. "Todos los directores estarán en ese comité dirigidos por el director general", especificó Granados.

Esta reforma se produce tras las críticas surgidas contra el organigrama de la Consejería de Interior, que hasta ahora permitía --según la oposición-- duplicidades y diversas estructuras internas que desembocaron en los presuntos casos de espionaje en la Comunidad.