Gallardón considera que la "parálisis del Gobierno" en materia económica se debe a que los líderes están "asustados"

MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, hizo suyas hoy unas palabras del escritor israelí David Grossman aludiendo a que la "parálisis del Gobierno" central a la hora de efectuar las reformas estructurales necesarias para sacar a España de la crisis económica se debe a que "sólo los líderes pueden cambiar las cosas, pero suelen ser gente asustada".

En el último 'post' publicado por el primer edil en su blog, titulado 'Vencer el miedo, superar la crisis', Gallardón considera que esa afirmación del escritor, aludiendo a la solución del conflicto de Próximo Oriente, "es válida para muchos otros fracasos, de toda índole y procedencia".

"Se trata de una explicación que serviría para entender, que no compartir, la actual parálisis del Gobierno español a la hora de reaccionar frente a la crisis económica. Sólo así puede concebirse que haya postergado toda reforma, incluso de aspectos menores, para condicionarla a un pacto de Estado que, sin duda, es herramienta para más altos y arduos cometidos", opina el regidor madrileño.

A su parecer, las medidas anunciadas por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero como el IVA reducido, el impulso a las energías renovables o el fomento del alquiler son "asuntos sobre los que puede y debe legislar sin necesidad de un apoyo especial de los demás partidos y, por tanto, sin mayor dilación".

Además, pone el caso de los consistorios españoles, particularmente el de la capital, como ejemplo en este sentido, al decir que muchas medidas adoptadas por su Gobierno en pro de la reactivación económica se han hecho "sin necesidad del respaldo de la oposición" y simplemente gracias a la "determinación política y el apoyo de los agentes sociales".

Sin embargo, el alcalde madrileño reconoce que "el esfuerzo asociado a acometer las reformas estructurales sin las cuales la crisis se resiste a remitir habría de ser lógicamente asumido por el conjunto de la sociedad, y en esa medida se justificaría una declaración conjunta de los principales partidos".

"Mientras tanto, pasar sin solución de continuidad de los Pactos de La Moncloa a un pacto de minucias no es sino desvirtuar la auténtica dimensión de esa herramienta, además de evidenciar la falta de sentido histórico --en el fondo, y pese a su revisionismo, éste es un Gobierno muy desmemoriado-- que nos ha conducido al actual estado de cosas", matizó.

PANORAMA DESOLADOR

Así, recomendó al Ejecutivo de la Nación que "evite al menos contradicciones como la que supone declarar primero que el equilibrio de las cuentas públicas queda supeditado a la recuperación de la actividad, y acto seguido mantener la subida del IVA", añadiendo que "todos los observadores, desde la Comisión Europea a la Fundación de Cajas de Ahorros, han advertido que (esa medida) no hará sino retrasar" la salida de la crisis.

Asimismo, destacó que "mientras no se desarrolle una economía exportadora --y esa transformación, que gira en torno al valor añadido que aporta el conocimiento, lleva tiempo--, España seguirá dependiendo de la demanda interna y, por tanto, de la creación de empleo, tanto por lo que se refiere a la producción como a la fortaleza del sistema financiero".

"¿Resulta un panorama desolador? Obviamente, salvo por un hecho: que tiene arreglo. Basta con una alternancia en el Gobierno que sustituya el miedo por la resolución, y la búsqueda de la adhesión incondicional por el auténtico diálogo, que no es el que se utiliza, como ahora, para enmascarar un reproche, sino el que sirve para proponer a la sociedad y a los partidos que la representan un horizonte más ancho y esperanzador, aunque al principio sea también más difícil de alcanzar", proclamó.

Finalmente, concluyó opinando que, aunque la sociedad española "está preocupada" no está "en suspenso", y además goza de la "madurez necesaria para asumir ese reto".