MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarticulado una organización dedicada al robo de cable de cobre en diversas comunidades españolas con la detención de 55 personas en una operación, denominada "Gallinero", en la que se han intervenido además 20 toneladas de cobre, 31 vehículos y 4 armas de fuego.
Dentro del marco del "Plan de respuesta Policial al robo de cableado de cobre" puesto en marcha por la Dirección General de la Guardia Civil con la finalidad de evitar el robo de cable telefónico, las unidades del SEPRONA de la Comandancia de Madrid realizan diversos servicios y controles operativos en distintos establecimientos, sobre todo en aquellos donde se sospechaba que pudiera estar realizándose la compra de cable telefónico cuya procedencia no fuera legal.
Gracias a estas vigilancias se pudo localizar e identificar al grupo ahora desarticulado, integrado en su totalidad por ciudadanos de origen rumano, que tenían fijada su residencia en un poblado marginal de Madrid.
La organización presentaba una estructura perfectamente coordinada y jerarquizada, donde cada miembro desempeñaba unas funciones específicas, por un lado para localizar lugares donde cometer los robos, y por otro para hacer efectiva la sustracción. Asimismo, otros integrantes se ocupaban del traslado del material intervenido, de su ocultación y, finalmente, de la eliminación mediante la quema del material que aísla el cable de cobre, para posteriormente venderlo al peso.
El desarrollo de la operación ha permitido detener a 48 personas por el robo del cobre y a 7 personas por receptación y se han podido recuperar 20.000 kilogramos, el cual procede, en su inmensa mayoría procedente de robos de cable telefónico.
A los detenidos se les imputan más de 50 robos acaecidos en las Comunidades Autónomas de Madrid, Castilla y León, Castilla y la Mancha, Comunidad Valenciana y Andalucía. Algunos de estos robos dejaron incomunicadas a poblaciones enteras, cuyos habitantes vieron limitados los accesos a los servicios básicos, y sobre todo a los de emergencias.
Asimismo han sido inspeccionadas cuatro chatarrerías, tres ubicadas en la provincia de Madrid y una cuarta en Toledo, tras lo cual han sido detenidos los responsables de las mismas.
Las últimas actuaciones de esta operación se desarrollaban a lo largo del pasado fin de semana lográndose detener a varios de los componentes de la organización, entre ellos uno de los principales objetivos de la investigación, en la localidad sevillana de Lora del Río.
El operativo ha sido coordinado por el titular del Juzgado de Instrucción número Tres de los de Madrid, quién ha decretado el ingreso en prisión incondicional de siete de los detenidos.
