MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil y la Agencia Tributaria consiguieron, en una operación conjunta, interceptar mil kilos de cocaína ocultos en dos contenedores en Humanes y Coslada introducidos por el método del 'gancho perdido'.
Este método consiste en introducir la droga en contenedores cuyo destino son empresas completamente ajenas al narcotráfico. Una vez que la mercancía llega a su destino, los delincuentes tienen que estar pendientes de recoger la droga intentando pasar desapercibidos. Permite a los narcos ahorrarse los sueldos de los intermediarios.
La Guardia Civil y la Agencia Tributaria interceptaron un total de 2.513 kilos de cocaína que iban a ser introducidos en España en contenedores procedentes de Colombia y México, cuyo destino final eran distintas empresas ubicadas en la Comunidad de Madrid y en la provincia de Barcelona. Han sido detenidas tres personas por su implicación en los hechos.
La operación tenía su origen el pasado mes de febrero, tras localizar de forma rutinaria en una empresa ubicada en Humanes un contenedor que supuestamente transportaba generadores eléctricos y en el que se descubrieron varios paquetes de cocaína, que arrojaron un peso de 400 kilogramos.
Este hallazgo motivó que se procediera a contactar con las unidades de análisis de riesgo de la Guardia Civil y la Agencia Tributaria para localizar la procedencia del contenedor que albergaba esta mercancía, lo que permitió localizar otro contendor en el Puerto Seco de Coslada.
Tras proceder a su apertura, se descubrió que alojaba otros 600 kilos de cocaína en el interior de varias sacas. En la documentación correspondiente al contenedor se declaraba que transportaba refrescos gaseosos.
Este contenedor, al igual que el anterior, había sido introducido en España a través del puerto de Valencia y en el mismo buque, por lo que también se comunicó a la Guardia Civil valenciana, que continuaron con la investigación junto con los agentes de Vigilancia Aduanera.
En el puerto valenciano, tras un estudio de la mercancía que había viajado en el mismo buque, los agentes inspeccionaron 15 contenedores logrando localizar en un doble fondo practicado en uno de ellos hasta 1.212 kilos de cocaína, cuyo destino final era una empresa de Viladecans (Barcelona).
Fruto del dispositivo puesto en marcha sobre este contenedor se logró detener al receptor de la mercancía y a dos personas más por su implicación en los hechos. Todos ellos son ciudadanos españoles.
La última actuación desarrollada en esta operación antidroga tuvo lugar el pasado 8 de marzo con la incautación de otros 301 kilogramos de cocaína, ocultas en un contenedor cuya documentación también declaraba transportar bebida gaseosa.
La droga intervenida se encuentra depositada en dependencias oficiales de la Guardia Civil de Madrid y Valencia, dándose la operación como concluida. Las investigaciones han sido llevadas a cabo por los Equipos de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de las Comandancias de la Guardia Civil de Madrid y Valencia, conjuntamente con los Servicios de Vigilancia Aduanera de ambos lugares.
