Madrid tendrá un nuevo modelo de gestión del alumbrado público a partir de 2009 con un centro único de control

MADRID 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La ciudad de Madrid contará, a partir de enero de 2009, con un nuevo modelo de gestión del alumbrado público que, partiendo de la externalización con que este servicio es gestionado desde su creación en los años 40, permitirá mejorar los criterios de eficiencia y contaminación lumínica a la vez que reducir las incidencias gracias a un centro único de control.

La delegada de Obras y Espacios Públicos, Paz González, avanzó hoy la creación del nuevo Plan director del Alumbrado Público tras la reunión con dos representantes de la Fundación Bill Clinton. A partir del 3 de mayo, cuando entra en vigor la nueva Ley de Contratación, el Ayuntamiento publicará en el Diario de las Comunidades Europeas el anuncio del contrato, que tendrá una duración aproximada de 25 años.

Así, a partir del próximo mes de enero el Ayuntamiento pretende contar con un nuevo modelo de gestión integral que "mejorará la eficiencia y reducirá la contaminación acústica", temas de principal preocupación para el Ejecutivo local.

La adjudicataria del contrato será la encargada tanto de gestionar la iluminación de la capital como de continuar con el proceso de cambio de las luminarias, el 90 por ciento de las cuales "ya son de baja contaminación". También deberá encargarse de garantizar la eficiencia para que "Madrid siga liderando las ciudades europeas en esta materia".

Antes de adjudicar el contrato, el Ayuntamiento estudiará "lo que ofrece el mercado", sin descartar incorporar la tecnología LED al alumbrado público madrileño. "Ahora tenemos los medios más avanzados, pero el mercado evoluciona y habrá que ver qué ofrece", puntualizó González.

Además, habrá un centro único de control para supervisar el servicio y determinar qué calles necesitan qué tipo de iluminación para producir un ahorro energético sin empeorar la seguridad ni la visibilidad para los vehículos. "Ni todas las calles ni a todas las horas se necesita la misma intensidad de luz", apostilló la concejala, añadiendo que "con esto se evitarán los apagones inesperados que a veces hay con el servicio por zonas actual".

COLABORACIÓN CON LA FUNDACIÓN BILL CLINTON

En la reunión que González mantuvo con el responsable de Coordinación de Ciudades en Europa de la Fundación Bill Clinton por el Cambio Climático, Göran Carstedt, y con el responsable de Transportes, Peter Ekenger, la delegada de Obras y Espacios Públicos explicó también el trabajo del Ayuntamiento en temas como la sustitución del asfalto. "Les hemos contado las pruebas que se están haciendo para usar una pavimentación con neumáticos reciclados, que reducen la contaminación acústica y las emisiones", añadió la edil.

González también aportó cifras sobre lo hecho por su área de Gobierno en los últimos tres años. "Hemos reducido en 4,8 millones de kilowatios al año el consumo, las emisiones de CO2 a la atmósfera en 8,6 toneladas, y seguiremos trabajando en hacer una gestión más eficiente, porque es el objetivo que nos hemos marcado".

"Les ha gustado mucho nuestra gestión, han dicho que están sorprendidos por las cifras de reducción del consumo. Como por ejemplo en Navidades, cuando se redujo en un 18 por ciento el consumo a pesar de triplicar el número de bombillas", subrayó la edil. Además, mencionó que la Fundación Bill Clinton "ha ofrecido la ayuda de sus técnicos y especialistas para seguir mejorando".

Según datos municipales, de las 245.900 luminarias de Madrid sólo quedan por cambiar los globos del 10,6 por ciento para reducir la contaminación lumínica, así como las bombillas del 2 por ciento por otras más eficientes. En concreto, éstas últimas son las que alumbran monumentos y fuentes ornamentales.

Tras la reunión de esta mañana con la concejala, los expertos de la Fundación Bill Clinton mantendrán más reuniones en la capital, entre otras con el director de Sostenibilidad y Agenda 21 del Ayuntamiento, Javier Rubio. Luego, contarán todo lo que vean en Madrid a las administraciones de otras ciudades con las que también trabajan, para que todas se puedan aprovechar de los avances de las demás.

Estas reuniones se engloban en la línea de trabajo que Madrid emprendió como miembro del 'Grupo de Liderazgo de Ciudades del Mundo sobre Cambio Climático', junto con otras 21 urbes, con el objetivo de "unir esfuerzos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero", concluyó González.