MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El paro y la tragedia del Madrid Arena han hecho acto de presencia en el discurso con el que la alcaldesa de la capital, Ana Botella, ha abierto su segundo Debate de Estado de la Ciudad como regidora, en el que también ha hecho un repaso por los deberes hechos.
Lo ha hecho ante un concurrido Palacio de Cibeles, donde se han dado cita el portavoz del Gobierno regional, Salvador Victoria, la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, los portavoces de PSM, IU-CM y UPyD, Tomás Gómez, Gregorio Gordo y Luis de Velasco, respectivamente, el presidente de CEIM, Arturo Fernández, el exalcalde José María Álvarez del Manzano o el exvicealcalde Manuel Cobo, entre otros.
Botella ha arrancado su primera intervención en el Palacio de Cibeles definiendo este año como uno de "enormes dificultades para todos los españoles, también para Madrid y particularmente para este Ayuntamiento". "Madrid no es ajena a una situación económica de recesión que se ha traducido en unos graves niveles de desempleo, que es el mayor de los desafíos políticos y sociales al que nos debemos enfrentar", ha apostillado.
Concretamente, en Madrid hay hoy 257.500 personas en paro, un número que ha crecido en el último año "aunque a menor ritmo que en el anterior". Tras matizar que la tasa madrileña de desempleo está prácticamente ocho puntos por debajo de la media nacional siguen siendo, en palabras de la primera edil, "!cifras insoportables para una ciudad que aspira a ser de nuevo una referencia nacional e internacional en generación de actividad económica".
Así, la 'popular' se ha comprometido a hacer todo lo que esté en su mano "para romper una tendencia que, aunque se ha corregido en los últimos meses y los datos de esta misma semana son alentadores, sigue atenazando las perspectivas de recuperación".
Mención aparte ha hecho para la tragedia del Madrid Arena. "Ningún balance desde este Ayuntamiento sería posible sin tenerla en cuenta", ha declarado después de asegurar que fueron uno hechos dramáticos que conmocionaron a todos y que deben servir para "procurar que nunca más vuelva a repetirse algo parecido" en la ciudad.
"Hoy quiero volver a recordar a las cinco jóvenes fallecidas y reiterar a sus familiares y amigos mi solidaridad y mi compromiso, como he hecho hasta ahora, de hacer todo cuanto esté en mi mano para evitar que Madrid vuelva a sufrir un suceso como ese", ha subrayado la alcaldesa.
A renglón seguido, la primera edil ha hecho un repaso por algunas de las promesas hechas durante el Debate del Estado de la Ciudad del año pasado y cumplidas. Así, Botella ha recordado que prometió poner al día al Ayuntamiento en el pago a proveedores y se "ha logrado".
"Dije entonces que daríamos pasos decisivos hacia un nuevo modelo de contratación de servicios y hoy es de actualidad la adjudicación del primero de los mismos. En los próximos meses verán la luz el resto de contratos integrales. Dije que revisaríamos la dimensión de la Administración municipal y la estamos llevando a cabo", ha declarado.
También ha recordado que desde el pasado julio, nueve de cada diez negocios pueden abrir sin necesidad de licencia previa. "Me había comprometido a eliminar trabas administrativas", ha añadido, sin olvidar la adjudicación de 77 viviendas a personas desahuciadas.
Por otro lado, Botella ha señalado que la liquidación del presupuesto de 2012 "revela que las finanzas del Ayuntamiento son sostenibles", con "superávit tanto en términos presupuestarios (1.097,7 millones de euros) como en términos de contabilidad nacional (878,7 millones de euros)", además de haber pasado de un remanente de tesorería negativo en 876 millones de euros a un dato positivo de 4,3 millones de euros.
"Eso nos demuestra que las medidas que hemos tenido que tomar y el esfuerzo que hemos tenido que pedir a los madrileños y a los empleados públicos no ha sido en vano", ha defendido después de repetir una frase que se ha convertido, casi, en su lema, "no se puede gastar más de lo que se ingresa".
La aplicación de ese principio "ha permitido equilibrar el presupuesto manteniendo los servicios esenciales que se presta a los madrileños", lo que se ha conseguido reduciendo gasto corriente, resolviendo alquileres, renegociado a la baja las rentas de los que siguen vigentes, de tal forma que se ha conseguido un ahorro de 2,8 millones de euros, eliminando cargos directivos y personal eventual, recortando el número de vehículos, racionalizando el consumo de agua, energía y telefonía e introduciendo criterios para mejorar la eficiencia en los contratos.
