Pinto declara que Granados le reconoció que el subdirector de Seguridad era autor de los partes de seguimientos

Abogado de un imputado en el caso de los espías
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 17 octubre 2012 16:09

Su abogado dice que Pinto está "aterrorizado"


MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

El exfuncionario de la Comunidad de Madrid José Manuel Pinto, uno de los cinco imputados en el 'caso de espionaje' a altos cargos del PP de Madrid, ha declarado este miércoles auto exculpándose ante la juez Carmen Valcarce y diciendo que el diputado regional y senador del PP Francisco Granados le reconoció que el autor de las notas de los partes de seguimiento fue el entonces subdirector del departamento de Seguridad Miguel Castaño, han informado fuentes jurídicas.

Pinto ha acudido esta mañana a declarar a petición propia para aclarar el contenido de una denuncia que presentó en verano ante sus altos mandos en la que explicaba que el autor de los partes de vigilancias al ex vicealcalde de Madrid Manuel Cobo y al ex consejero de Justicia Alfredo Prada en 2008 era el 'número dos' del ex director de Seguridad Sergio Gamón, otro de los imputados.

En el procedimiento judicial están imputados tres ex guardias civiles, Gamón y Manuel Pinto. A éste último se le atribuye ser el autor de las notas manuscritas que aparecen en los partes de seguimiento a raíz de unos informes caligráficos, cosa que él ha vuelto a negar en esta ocasión.

Un año después de que Pinto declarara, ahora desvela supuestas conversaciones y nuevos datos destinados a modificar el sentido de la investigación. Su abogado, José Ramón González Bosch, dice que su patrocinado está "aterrorizado".

A las puertas de los juzgados, el propio Pinto se ha quejado de que antes era el responsable del servicio de apoyo del ex alcalde de Madrid Alberto Ruiz Gallardón y ahora ha pasado a "no ser nada". "Parece que todos somos una mierda", ha declarado a los periodistas visiblemente afectado.

El abogado Wilfredo Jurado, que representa al PSM, ha destacado a Europa Press que su declaración modifica todas las conclusiones que se tenían hasta ahora al dar "un vuelco absoluto a la investigación". "Estamos estudiando cómo continuar", ha señalado.

ENCUENTRO CON GRANADOS

Según el abogado de Pinto, "Granados citó al señor Castaño" a su despacho, que estaba bajo las ordenes de Gamón y más tarde de Enrique Barón. "Tras ello, comparecieron en su despacho Palacios, Peña, Palomo y Pinto. A mi cliente le pidió perdón por desconfiar y le dijo que ahora le podía asegurar que era Castaño", ha recalcado su letrado, quien ha avanzado que contratarán a un perito para que exculpe a su cliente.

Asimismo, el abogado solicitará la testifical de José Palomo Gallego, el que fuera asesor de Seguridad de Marcos Peña y Palacios. Además, pedirá vía suplicatoria al Tribunal Supremo para que Granados conteste por escrito a las preguntas que se le realice.

Bosch ha destacado que Granados "no tenía nada que ver con este tema". "Fue una sorpresa mayúscula cuando se encontró con todo esto. La verdad es la que se dice ahora. A Castaño alguien le tendrá que preguntar quién sabia de esto", ha señalado.

REAPERTURA DEL CASO

El 'caso del espionaje' se encontraba estancado desde hace varios meses después de que la Audiencia de Madrid hubiera ordenado hasta en dos ocasiones reabrir el proceso, cuya instructora había archivado al estimar que los hechos no son constitutivos de delito.

Este procedimiento arrancó en mayo de 2009, cuando la juez incoó unas diligencias previas por un presunto delito de malversación de fondos públicos en relación con la denuncia presentada por el exvicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, el 29 de febrero de 2009.

El entonces 'mano derecha' de Alberto Ruiz-Gallardón denunció haber sido víctima de vigilancias entre abril y mayo de 2008. En las diligencias se sumó la denuncia presentada por el ex consejero Alfredo Prada ante la Fiscalía de Madrid.

Los seguimientos en los que aparecen las notas manuscritas sobre matrículas corresponden a las contravigilancias realizadas sobre Prada en mayo de 2008 en Chinchón, donde tuvo una reunión con su equipo, y el 23 de mayo a Brea del Tajo.

IMPUTACIÓN DE PINTO POR INFORMES CALIGRÁFICOS

La imputación de Pinto se realizó a instancias de informes caligráficos que le señalaban como autor de las notas. Este informe concluyó que era el autor material de las anotaciones que aparecían en los partes de seguimiento.

La letra coincidía con diversas anotaciones. Una de ellas es la matrícula anotada del vehículo de la diputada regional del PP Carmen Rodríguez Flores, una de las supuestas espiadas.

En su declaración, Pinto reconoció que se montó un dispositivo de seguridad con anterioridad a 2008 en el domicilio de Prada, del que estaban informados tanto el ex consejero como sus escoltas.

Todos los procesados insisten en sus declaraciones que nunca se siguió a Cobo ni a Prada, ya que su función se limita a la de control de edificios y seguridad de actos oficiales.

La Fiscalía de Madrid cuenta con varias pruebas de cargo que podría sustentar su imputación. Una de ellas sería un informe sobre posicionamientos telefónicos que confirmaría que los tres ex guardias civiles siguieron en abril de 2008 a Cobo.

El escrito determinó que los imputados estaban en los lugares donde se vigilaba a Cobo a la misma hora y fecha en la que se refleja en los partes de seguimiento.