Quiosqueros reconocen en Madrid que ha caído el consumo de coleccionables con los años debido a la crisis

EUROPA PRESS

MADRID 4 Sep. (EUROPA PRESS) -

Como cada mes de septiembre coleccionables de todo tipo llegan a los quioscos y copan los anuncios publicitarios de televisión aunque con el paso de los años, el número de fascículos que se ofertan ha ido disminuyendo progresivamente.

Así lo ha explicado en declaraciones a Europa Press Televisión, María Dolores, propietaria de un quiosco cerca de la madrileña Plaza Castilla desde hace más de treinta años, tiempo en el que ha contemplado como la venta de los coleccionables ha ido cayendo, principalmente en los últimos años, un hecho que lo relaciona con el peso de la crisis.

"Se nota en que los primeros fascículos se venden muy bien pero cuando va caminando por el cuarto o el quinto la gente se va tirando para atrás porque el precio aumenta", ha señalado María Dolores, quien ha reconocido que suele advertir a los consumidores de esta situación antes de que decidan comenzar alguna colección.

Hasta el momento ha recibido un total de diez fascículos, aunque confía en que a lo largo del mes vaya entrando mayor cantidad. No obstante, ha aseverado que en años anteriores llegaron a trabajar con hasta 30 colecciones que iban desde partes del cuerpo humano, hasta barcos, coches o cualquier otro tipo de fascículos de montaje.

Por ahora sigue liderando las ventas las colecciones relacionadas con ganchillo y abanicos. "La de ganchillo está agotada, porque es de lo primero y siempre se acaba", ha explicado María Dolores. El perfil de usuarios suele corresponder a mujer y en su mayoría de edad avanzada, así como gente de oficina y funcionarios debido a la ubicación del puesto, cerca de los Juzgados de Plaza Castilla.

COLECCIONES DEMASIADO LARGAS

A juicio de la propietaria, el problema de algunas colecciones es que se alargan llegando incluso a los 70 u 80 fascículos y en su opinión se trata de una gran cantidad "que se debería reducir". Aún así también hay un gran número de clientes que termina las promociones porque están suscritos a ellas.

"Aquí tenemos bastante gente que las acaba porque vienen a su nombre y no se quedan colgados ya que nosotros lo reservamos. Está la cosa flojita ahora mismo, normalmente aquí venía como 30 colecciones nuevas en septiembre o más (...) y hemos visto como desgraciadamente ha ido bajando, sobre todo el consumo de prensa", ha sentenciado.