Resignación de los viajeros en la estación de Méndez Álvaro ante la octava jornada de huelga

Actualizado: domingo, 22 agosto 2010 20:39

El delegado sindical de UGT prevé que la huelga se alargue hasta el próximo 1 de septiembre

MADRID, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -

La huelga de los empleados de Auto-Res, que alcanza hoy su octava jornada de paros, se desarrolla con normalidad y sin incidencias, con un seguimiento del cien por ciento de los trabajadores y cumpliendo los servicios mínimos establecidos del 30 por ciento, un paro que, en palabras de los propios viajeros, "ya no sorprende".

Así lo ha explicado Héctor, viajero que se encontraba en la estación de Méndez Álvaro, y quien ha reconocido que para él esta situación "no es nueva", ya que desde abril padece las consecuencias de la huelga. Héctor solía coger el autobús cada fin de semana para viajar a Zamora, sin embargo esta nueva situación, le ha impulsado a utilizar más el coche para ir a su destino, según ha explicado él mismo en declaraciones a Europa Press Televisión.

El delegado sindical de UGT en Auto-Res, Francisco Morales, ha afirmado que "los servicios mínimos se están cumpliendo con normalidad y sin ningún problema", además, ha añadido que no tienen ninguna noticia de la empresa desde el mes de junio. Según Morales, está previsto que la huelga dure hasta el 1 de septiembre.

Por su parte, el secretario del comité de empresa de Auto-Res, Fernando Delgado, ha explicado que la huelga está convocada "por el incumplimiento generalizado de los acuerdos de empresa" y "por los despidos que se produjeron el 8 de abril", así como las presiones que están recibiendo los empleados de Auto-Res.

Pepe, que se encontraba esperando en la estación de autobuses de Méndez Álvaro, ha explicado que viajaba a Valencia pero que debido a la huelga tenía que esperar ocho horas a que saliera el próximo autobús. Además, ha asegurado que los viajeros no tienen que "pagar los conflictos que puedan tener los empresarios con los trabajadores" y que al final "los pasajeros son los únicos perjudicados".

En cambio, Juan tuvo más suerte, ya sólo tuvo que esperar 3 horas en la estación porque consiguió adelantar la hora de salida de su autobús con destino Salamanca.