MADRID 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos CC.OO. y UGT han considerado este lunes que el aumento de la siniestralidad refleja "un claro empeoramiento" de las condiciones de trabajo y tachan de "inadmisible" el elevado número de trabajadores que sufrieron accidentes laborales durante 2010, de los que 92 fueron mortales.
Por un lado, CC.OO. ha destacado en un comunicado, como elemento especialmente negativo, el incremento de los accidentes laborales mortales en el sector de la construcción (de 15 en 2009 se ha pasado a 19 en 2010) y el mantenimiento de las cifras en la industria, así como el crecimiento de los accidentes in-itínere.
Para el sindicato, estos datos reflejan como las cifras de siniestralidad laboral prácticamente se mantienen en niveles similares o incluso, como en el caso de la construcción, aumentan.
"Todo ello a pesar de que se ha perdido empleo y que éste se concentre en sectores y segmentos de especial siniestralidad como la construcción y la industria o en colectivos más vulnerables con empleos más precarios", ha destacado CC.OO.
Para el secretario de Salud Laboral de CC.OO. de Madrid, Carmelo Plaza, resulta evidente que los datos de 2010 reflejan el empeoramiento de las condiciones de trabajo que se traducen en accidentes.
Además, de las cifras se desprende que "algunas obligaciones empresariales, como velar por la salud y la seguridad de los trabajadores, forman parte de las primeras medidas de recorte de gasto, cuando deberían ser mantenidas como una inversión y no modificarse siempre a la baja".
A estos datos habría que sumar los accidentes y enfermedades profesionales no declaradas, que se producen en la economía sumergida y que, en momentos de crisis, aumenta de forma considerable. Además, se hacen contratos más temporales, precarios y con menos derechos lo que, según Plaza, "hace que las condiciones de salud y seguridad en los centros de trabajo cada vez se queden más relegadas a un segundo o tercer plano".
El secretario de Salud Laboral del sindicato ha apuntado que, para este 2011, es necesario intensificar las actuaciones de la Inspección de Trabajo, como instrumento fundamental de control, y del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo, como instrumento gestor de las políticas preventivas en la Comunidad.
Ante esto, CC.OO. ha apostado por el desarrollo en su totalidad de todas las actividades preventivas acordadas en el III Plan Director en Prevención de Riesgos Laborales, y considera imprescindible que a lo largo del año 2011 se negocie un IV Plan Director que asegure que las políticas preventivas no sólo sean mantenidas en el tiempo, sino que se vayan reforzando cada vez más.
ACCIONES COMPLEMENTARIAS
Por otro lado, UGT ha exigido que tanto la Administración como el empresariado tomen conciencia de este problema y emprendan todas las acciones complementarias que se estimen oportunas para corregir esta lacra del mercado de trabajo regional.
"Con la crisis se han relajado excesivamente las medidas de prevención de riesgos, considerándose un gasto prescindible", ha recalcado.
El sindicato ha alertado de que el menor número de accidentes se debe en último término a la caída de la actividad productiva. No obstante, ha señalado que no existe una correlación proporcionada entre ésta y el número de siniestros, que continúan aproximándose peligrosamente al centenar, lo que revela la escasa cultura preventiva en la región y el excesivo desinterés del empresariado, que continúa viendo la prevención como un gasto antes que como una inversión.
"Si el desempleo, de acuerdo con los datos facilitados por el Ministerio de Trabajo, ha aumentado en 10.000 personas, de 451.929 en diciembre de 2009 a 461.928 en diciembre de 2010, el número de accidentes mortales se ha reducido en 3 trabajadores", ha apuntado.
"Desde que estallara la crisis, mientras el número de accidentes totales ha descendido en la construcción, han aumentado los mortales en este sector y los graves en la agricultura y la industria. Es decir, no es que la siniestralidad se vaya corrigiendo, sino que se ha ido desplazando a otros sectores", ha apuntado.
UGT-Madrid ha exigido un notable aumento de los medios materiales y humanos de la Inspección de Trabajo, así como que la Administración Regional controle enérgicamente la precariedad laboral, causa principal de la siniestralidad. La publicación del listado de empresas infractoras persuadiría a quienes no dudan en incumplir la legislación con tal de incrementar sus beneficios.
"Todas estas medidas, y otras que deben acordarse en los distintos ámbitos de la concertación social, contribuirán, sin duda, a instalar en la sociedad una cultura de tolerancia cero que corrija el excesivo número de accidentes en la región", ha concluido.