VIGO, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
La dirección de la planta viguesa del Grupo PSA ha planteado este lunes al comité de empresa la aplicación de un expediente de regulación de empleo de carácter suspensivo durante 50 días, que afectaría potencialmente a unos 400 empleados de la M1 --que monta los modelos Peugeot 301 y C-Elysée--, así como eliminar un turno de este sistema de producción y recolocar a otros 400 operarios.
Así lo han trasladado a Europa Press fuentes de la empresa, tras la reunión celebrada en la mañana de este lunes, en la que ha quedado constituida la comisión de negociación del ERTE.
La entidad ha justificado la aplicación de este expediente regulatorio por la baja demanda de los modelos fabricados en esa línea de montaje, que ha obligado a establecer días de parada obligados en las últimas semanas --y más días no laborables previstos para las próximas--.
Los modelos Peugeot 301 y C-Elysée son vehículos considerados 'maduros' y que ya experimentaron un 're-styling' (actualización de su aspecto) en 2016 y, por tanto, su producción es más sensible a los vaivenes del mercado.
Además, los principales destinatarios de estos coches fabricados en Vigo, que son Turquía y Argentina, están atravesando problemas de devaluación monetaria e inflación, que han provocado un descenso notable en la demanda. De hecho, la empresa estima que el descenso de producción de estos modelos en 2019 puede rondar el 40%.
IMPACTO DEL ERTE
Fuentes de la empresa han señalado que, si se aplica el expediente de regulación a la M1 tal y como produce ahora --con dos turnos--, el impacto sería de 100 días y los operarios afectados, unos 800.
La propuesta de la dirección pasa por suprimir uno de los turnos, recolocando a sus 400 operarios en el sistema M2 y en otros equipos transversales, y aplicar la regulación a los 400 trabajadores restantes --a cada uno en función del estado de su bolsa de horas-- durante 50 días.
Con respecto al período de aplicación de esta medida regulatoria, la empresa no ha avanzado cuál sería, aunque ha matizado que se trata de un ERTE que sirve de "transición" hasta que la M1 se "sature" con el montaje del nuevo modelo --el todocamino denominado proyecto V20--. Esta situación puede darse en la fábrica viguesa a partir de mediados de 2019.
Las mismas fuentes han puntualizado, ante la demanda de los sindicatos de que se "reparta" el trabajo de la M2, que tiene unos altos niveles de producción, que no se puede trasladar el montaje de las furgonetas a la M1, puesto que "las plataformas son diferentes".
VALORACIÓN DE LOS SINDICATOS
El sindicato mayoritario en la fábrica, el SIT, ha trasladado su intención de estudiar la propuesta de la empresa, y ha insistido en que su deseo es que el ERTE "tenga los mínimos efectos posibles" en la plantilla, según ha apuntado el presidente del comité, Juan José Muñoz.
En la misma línea, la portavoz de UGT, Ana Belén Valiño, ha apostado por "buscar alternativas para minimizar" el impacto del ERTE, y ha recordado que los trabajadores de la M1, "están siendo penalizados desde septiembre", con la sucesión de días de parada motivados por la baja demanda de esos modelos.
Por su parte, Vítor Mariño, de la CUT, ha trasladado el rechazo de este sindicato a la propuesta de la empresa, y ha denunciado que es "un despropósito" plantear una regulación de empleos en una factoría en la que hay 2.100 trabajadores eventuales y de subcontratas. "Hay de dónde tirar antes que mandar a la gente para casa", ha proclamado.
La CUT ha vuelto a defender que se "reparta" la carga de trabajo "y no la precariedad" entre las dos líneas y ha subrayado que, en su día, ya se trasladó parte de la producción de furgonetas a la M1. "La empresa dice que no se puede hacer, porque no quieren hacer la inversión para adecuar la plataforma", ha denunciado.
La comisión negociadora del ERTE ha aprobado el calendario de reuniones y prevé el próximo encuentro para el 15 de noviembre. Asimismo, se ha establecido como fecha para fijar las condiciones definitivas del expediente el próximo 21 de noviembre, y el 26 de este mes tendrá que sellarse el acuerdo definitivo con los sindicatos.
