La compañía ha suspendido a nueve directivos por los problemas de las emisiones
MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
El consorcio automovilístico alemán Volkswagen prevé completar a lo largo de todo 2016 la revisión y la introducción de las soluciones técnicas necesarias en los modelos afectados en Europa por el caso del software que altera las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) en el motor EA 189 de 1.2, 1.6 y 2.0 litros de cilindrada.
Según anunció el presidente de la compañía, Matthias Müller, las soluciones técnicas desarrolladas por Volkswagen a estos problemas han sido aprobadas por las autoridades europeas, por lo que las llamadas a revisión se iniciarán en enero y se llevarán a cabo a lo largo de todo el año.
Así, la campaña de los vehículos con el motor EA 189 de 2.0 litros, el de mayor volumen, dará comienzo en Europa en enero, mientras que la acción para el propulsor de 1.2 se iniciará en el segundo trimestre, y la del de 1.6 litros, en el tercer trimestre.
La compañía señaló que en el caso de los motores de 2.0 y 1.2 litros se llevará a cabo una actualización del software, mientras que el de 1.6 litros se introducirá un transformador para mejorar la precisión de las mediciones y también recibirá un software rediseñado que optimice la inyección.
Desde la multinacional de Wolfsburg subrayaron que estas acciones técnicas y la revisión de los modelos afectados en Europa por el caso del software tendrán unos costes "manejables" en términos técnicos, de producción y financieros.
En cuanto a las soluciones a esta situación en Estados Unidos, la compañía señaló que los plazos se alargarán por la normativa más estricta de dicho país en términos de emisiones de NOx y resaltó que está trabajando con diferentes autoridades del país en avanzar y de presentar los resultados "lo antes posible".
CONSECUENCIAS.
Por otro lado, el presidente del consejo de vigilancia, Hans Dieter Pötsch, afirmó que el grupo está trabajando para identificar a los responsables de las conductas inadecuadas y afirmó que "son unos pocos individuos". En este sentido, resaltó que nueve directivos han sido suspendidos a raíz de estos escándalos.
"Ninguna operación de negocio justifica sobrepasar los límites legales y éticos", añadió el directivo, que apuntó que tendrán que actuar de forma decidida para que estos casos no se vuelvan a repetir en el futuro y para recuperar la confianza tanto de los clientes, como de los trabajadores, de los inversores y de los políticos.
En este sentido, destacó que las actuaciones irregulares descubiertas no fueron fruto de un error puntual, sino que fueron consecuencia de "una cadena de errores" que se permitió que se produjera.
Para determinar las responsabilidades y los errores en la estructura, la compañía ha puesto en marcha investigaciones internas y externas en las que participan más de 450 personas y señaló que éstas se implementarán en dos fases, una a través de una revisión interna y otra externa.
En los primeros avances de la investigación interna se han detectado conductas inadecuadas por parte de personas concretas, así como debilidades en algunos procesos y también brechas en la estructura. En el caso del análisis externo, que hará Jones Day con Deloitte, la previsión es que se dilate en el tiempo, por el alto volumen de información y porque los resultados se presentarán ante la justicia.
Entre las medidas que se adoptarán para evitar que esto vuelva a suceder destacan la introducción de la estrategia de 'cuatro ojos', a través de la que siempre serán dos personas las que desarrollen los dispositivos de control de los motores, al tiempo que las pruebas de emisiones del grupo se harán de forma externa e independiente.
Por otro lado, el presidente de Volkswagen destacó que la compañía ha presentado un nuevo plan estratégico para los próximos cinco años, que incluye una reorganización estructural y de los miembros de la directiva. Así, afirmó que el consejo de administración cuenta con seis nuevos miembros.
También resaltó la necesidad de llevar a cabo un cambio de mentalidad en el seno de la empresa, con el fin de aprovechar esta crisis como una oportunidad para "catalizar" los cambios que se debían implementar en la compañía. La previsión es que los detalles de la estrategia para los próximos diez años se presenten a mediados de 2016.
