HIROSHIMA (JAPON), 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fabricante japonés de automóviles Mazda cerró su primer semestre fiscal (abril-septiembre) con un beneficio neto de 5.744 millones de yenes (55,7 millones de euros al cambio actual), frente a unas pérdidas de 39.879 millones de yenes (387 millones de euros) en el mismo período de 2011.
Esta mejoría de los resultados se debe principalmente a que las cuentas de Mazda en el anterior ejercicio fiscal se vieron afectadas por el impacto derivado del terremoto y del tsunami del 11 de marzo en Japón.
La cifra de negocio de la multinacional japonesa se elevó a 1,023 billones de yenes (9.937 millones de euros) entre los pasados meses de abril y septiembre, un 6,7% más, mientras que el resultado operativo arrojó un beneficio de 11.475 millones de yenes (111,4 millones de euros).
Mazda vendió en todo el mundo 613.000 automóviles en los dos primeros trimestres de su ejercicio fiscal, lo que supone un crecimiento del 1,4%. La marca elevó sus ventas un 15,8% en Japón, pero en Europa se redujeron un 6,2%, con 85.000 unidades, como consecuencia de la situación económica en el Viejo Continente.
La empresa con sede en Hiroshima ha revisado a la baja sus previsiones de facturación y beneficio operativo para el conjunto del año fiscal 2012-2013, aunque confirma su objetivo de beneficio neto, que se situará en torno a 10.000 millones de yenes (97 millones de euros).
La firma prevé vender en todo el mundo 1,25 millones de vehículos en el año fiscal, que concluirá el próximo 31 de marzo, un 0,7% más, mientras que la cifra de negocio crecerá un 6,7%, hasta 2,17 billones de yenes (21.000 millones de euros).
