García exige para la Región una financiación a la altura de la media nacional

CARTAGENA (MURCIA), 28 (EUROPA PRESS)

La consejera de Hacienda, Inmaculada García, exigió hoy para la Región de Murcia, como comunidad infradotada de recursos, un volumen de financiación autonómica per cápita "que sea, como mínimo, equivalente a la media nacional" y se quejó de que la propuesta de acuerdo, basada en el censo de 2007, "deja fuera, hasta 2011, a 63.887 murcianos".

García, que compareció ante la Asamblea Regional para explicar su abstención en el acuerdo del 15 de julio, se reservó la petición concreta en términos cuantitativos, en función de la financiación adicional "que no se ha concretado y cuya concreción, en el caso de la Región, según la vicepresidenta, Elena Salgado, queda para septiembre". "Al parecer, se habla de 367 millones de euros el primer año", apuntó.

"Lo cierto es que el acuerdo incumple dos terceras partes del acuerdo de 21 puntos al que se llegó en la Asamblea Regional respecto a la financiación de la Región de Murcia", apuntó.

Consideró que el nuevo modelo de financiación autonómica acabará desembocando en el "enfrentamiento de las regiones más ricas contra las mas pobres al hacer desaparecer todo vestigio de solidaridad territorial", y justificó la abstención del Gobierno regional ante el riesgo de que un voto negativo supusiera la exclusión de la Región del sistema y de la financiación por fondos adicionales.

Según García, no se puede votar a favor de un modelo que "nace de la irresponsabilidad de un pacto directo con el tripartito catalán e impuesto de manera más o menos velada al resto de comunidades".

Entre ellas consideró que la Región de Murcia está entre las más damnificadas, junto a la Comunidad Valenciana, Madrid y Canarias. De ahí que, en su turno de réplica dijera que "es mentira que haya habido igualdad de trato con Cataluña".

UNA "PANTOMIMA"

A partir de ahí, según García, "las negociaciones del día 15 fueron una pantomima justificada sólo para cumplir los plazos de cierre de un acuerdo, como se había pactado previamente".

La petición para que la Región de Murcia sea mejor tratada se basa en su condición de comunidad con un crecimiento del 25,9 por ciento en la población hasta el 1 de enero de 2008 -cuando la media nacional es el 14 por ciento- con un aumento del mil por cien en inmigrantes -el doble que la media nacional- y como región líder en natalidad.

Respecto a los incrementos poblacionales, García se quejó de la nula referencia a la inmigración y el poco caso que se hace a la cantidad de población de menores de cuatro años, dadas las necesidades educativas y sanitarias que generan.

Por último, la consejera auguró una nula sostenibilidad "de un sistema que se financia en su totalidad con cargo al déficit". "Lo responsable hubiera sido eliminar tres o cuarto ministerios de los accesorios y financiar con esos fondos el sistema, sin recurrir al endeudamiento", aseveró.

LOS GRUPOS DE OPOSICIÓN

La oposición no entendió que una postura tan contraria del Gobierno regional sea compatible con la abstención manifestada. Pedro Saura, del PSOE, lo calificó como "un papelón" y José Antonio Pujante, lo tachó de "incoherente".

El portavoz socialista y diputado del PSOE, Pedro Saura, consideró que el modelo es "más solidario y equitativo y contribuye como ninguno a la cohesión y solidaridad interterritorial". "Por primera vez un murciano es considerado como un catalán en la financiación autonómica", añadió.

Por eso, Saura criticó que se critique un modelo que cumple con estas expectativas, "después de que se dijera 'si bwana' al anterior modelo, propuesto en 1999 por Aznar".

El diputado socialista consideró que el actual acuerdo "contribuye a la cohesión de España, mejora el estado bienestar, consigue que deje de haber españoles de primera y de segunda, establece la misma financiación per capita para los murcianos que para los catalanes y los mismos servicios públicos".

Asimismo, aseguró que "la Región sí estará, por primera vez, por encima de la media en financiación per cápita" y se atrevió a cifrar en 370 millones de euros la financiación adicional del primer año y en 500 en el tramo final.

Por su parte el diputado de IU, José Antonio Pujante Diekmann, consideró "incoherente" la abstención del Gobierno regional respecto a un sistema "que consolida unas desigualdades de hasta el 30 por ciento" entre las comunidades que más reciben y las que meno, que no fija una posición respecto a la corresponsabilidad fiscal y la bajada de impuestos por parte de las Comunidades Autónomas y deja fuera la financiación a los ayuntamientos.

A favor del sistema, señaló que "es más transparente" y se podrán conocer las cifras totales y contemplará la actualización anual por población.

Para Domingo Segado, del PP, el acuerdo del 15 de julio dará lugar a "un modelo insolidario, que provoca desigualdades y que discrimina a las Comunidades Autónomas del PP". Además, para Segado, "su contenido incumple los acuerdos de la Asamblea Regional respecto a la financiación".

Para Segado, no se puede criticar al Gobierno regional que apoyara el anterior modelo. "Está publicada su postura de que aquel acuerdo de 1999 era bueno. Si aplicamos su tesis, también usted hizo un papelón", apuntó.

Respecto al acuerdo actual, según Segado, "propicia que reciba más quien más riqueza tiene". "Un catalán recibirá, con este modelo, 200 euros más que un habitante de esta región, seis puntos por encima, en financiación per cápita, y nueve en porcentaje global", apuntó el diputado del PP

"Con este acuerdo, la Región nunca podrá aspirar a ser más rica que Cataluña porque se ha pactado que esa comunidad siempre tendrá que ocupar el mismo puesto en financiación", añadió.