El 95% de españoles ve importante o muy importante la amenaza islamista pero sólo el 42% ve probable un nuevo atentado

Actualizado: domingo, 22 abril 2007 14:06


MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -

Un 95 por ciento de los españoles encuestados por el Real Instituto Elcano en su último barómetro, realizado en diciembre de 2006, considera "importante" o "muy importante" la amenaza que supone para España el terrorismo islamista, si bien sólo 42,7 de los consultados estima "bastante" o "muy" probable que el yihadismo vuelva a atacar en España, porcentaje que se eleva hasta superar el 70 por ciento con respecto al riesgo que afrontan las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

Según el estudio 'Visiones del terrorismo internacional en la opinión pública española', elaborado por los investigadores Rut Bermejo y Fernando Reinares analizando los barómetros realizados por el centro entre noviembre de 2002 y diciembre de 2006 y recogido por Europa Press, el porcentaje de ciudadanos que estima "extremadamente o muy importante o importante" la amenaza que implica contra España el "terrorismo internacional" ha pasado del 85 por ciento inicial (noviembre de 2002) al 95 por ciento actual (diciembre de 2006), tras situarse en el 98 por ciento en marzo del pasado año.

La serie de encuestas muestra un claro aumento de la percepción de la amenaza del terrorismo islamista contra España, con un 47 por ciento de ciudadanos que la definen como "extremadamente o muy importante" en noviembre de 2002 al 61 por ciento que se expresa en ese mismo sentido en diciembre de 2006, después de la cota del 72 por ciento alcanzada en octubre de 2003.

A pesar de estos datos, una clara mayoría de ciudadanos no cree que se vaya a producir en España un nuevo atentado yihadista. Sólo un 42,8 lo ve "bastante probable" o "muy probable" frente al 54,3 que se inclina por el "poco" o "nada" probable. Los encuestados sí ven posible un nuevo ataque en Estados Unidos y en Reino Unido, un 80,9 considera muy probable o probable que el nuevo objetivo sea Norteamérica mientras que un 71,4 cree que Gran Bretaña puede ser nuevamente atacada.

La percepción del riesgo de un atentado de corte integrista se eleva de manera muy considerable con respecto a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Un 71,6 por ciento de los ciudadanos consultados sobre la relevancia de la informaciones que apuntan que el terrorismo islamista puede atentar contra España reclamando las ciudades autónomas valora como "importante" o "muy importante" esas noticias publicadas por los medios de comunicación. Tan sólo un 26,2 por ciento de los encuestados considera que no son importantes esas informaciones.

Reinares y Bermejo extraen como conclusión de los últimos barómetros del instituto que "una gran mayoría de los españoles se muestra decididamente preocupada por la amenaza" islamista, aunque con "algunas interesantes variaciones" en intensidad "a lo largo de ese tiempo" --de noviembre 2002 a diciembre 2006--.

"Tras la invasión de Irak en marzo de 2003 y los atentados de Casablanca ocurridos en mayo de ese mismo año se registra un marcado incremento en la percepción social del terrorismo internacional como una amenaza de muy considerable importancia para los intereses estratégicos de España, que se mantiene a partir de 2004, debido en buena medida a la memoria de los atentados del 11 de marzo", explican.

Ambos expertos señalan que la percepción social dominante entre los españoles relaciona las causas del terrorismo internacional más con "factores ideológicos y culturales" que con variables socioeconómicas o políticas. "Se tiene al fanatismo religioso, en concreto, como la causa principal de ese fenómeno. Sin embargo, cuando se trata de explicar una de las expresiones concretas del terrorismo yihadista, como es el caso de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, parece que los ciudadanos españoles se decantan por enfatizar causas de naturaleza política, como la acción exterior del Gobierno y en particular el alineamiento de las autoridades españolas con las estadounidenses en la invasión y ocupación de Irak", estiman.

A su juicio, "a la opinión pública española le es propia una visión sobre la causa de los atentados del 11 de marzo que no resulta del todo consistente con la percepción social mayoritaria sobre las causas a que atribuye el terrorismo internacional en general. La división de pareceres que suscita la idea de que una eventual salida de las tropas norteamericanas del territorio iraquí conllevaría una disminución del terrorismo internacional en el mundo es quizá una resultante de esa incongruencia a que se ha hecho anteriormente referencia".

A la hora de analizar los datos sobre el riesgo de nuevos atentados en España, Reinares y Bermejo señalan que hay que precisar el hecho de que "sólo la mitad de los españoles" parezca considerar probable que tras el 11 de marzo se vuelva a producir "un nuevo acto de terrorismo internacional". "Esta percepción social ha de ser matizada en atención a la inquietud con que la opinión pública da crédito a la verosímil amenaza de que se perpetren atentados islamistas con el fin de reclamar Ceuta y Melilla", aconsejan.

Finalmente, subrayan que la circunstancia de que la sociedad vea una seria amenaza para España en el terrorismo islamista y no se pronuncie en esa misma línea al ser preguntado por el riesgo de atentado yihadista "estaría poniendo de manifiesto otra relativa inconsistencia en las actitudes de la opinión pública respecto a estas cuestiones de seguridad nacional".