Argumenta que el acto fue programado en 2008 por el Ejecutivo municipal que entonces formaban PNV y EA
SAN SEBASTIÁN, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Ibarra, Mikel Agirrezabala (EH Bildu), ha asegurado que la decisión del Juzgado de decretar la suspensión cautelar del chupinazo de las fiestas de San Bartolomé, que iba a producirse este viernes a mediodía a cargo de familiares y amigos de presos de ETA, es "injusta y desorbitada".
La Comisión de Fiestas de la localidad guipuzcoana de Ibarra ha acatado la decisión judicial y ha decidido suspender el chupinazo de fiestas de San Bartolomé. El delegado del Gobierno, Carlos Urquijo, había reclamado la suspensión del acto por considerarlo "una ofensa flagrante a las víctimas del terrorismo".
El Juzgado ha comunicado al Ayuntamiento su decisión media hora antes de que se iniciara en primer acontecimiento festivo, a las 12.00 horas. La Comisión de fiestas, que se reunió este pasado jueves para adoptar una posible decisión, tras tener conocimiento de la denuncia por el Delegado del Gobierno, ha decidido acatar la resolución del juez.
Como alternativa al pregón, un representante de la Comisión ha dado lectura a un escrito en el que ha denunciado la suspensión del chupinazo, "algo tradicional en Ibarra", y han dicho no entender las causas de que se haya impedido.
El alcalde, Mikel Agirrezabala, y la Corporación han estado presentes en el acto de inicio de fiestas, como muestra de respaldo a la decisión de los organizadores de los festejos.
"OBLIGADOS"
El regidor ha manifestado que el chupinazo se ha suspendido "porque nos han obligado" y ha destacado que ante la medida cautelar decretada por el juez han decidido no llevarlo a cabo "por lo que pudiera pasar".
En ese sentido, ha considerado que "la medida es injusta y es desorbitada, porque no hemos adoptado la decisión nosotros", ya que la misma fue aprobada en 2008 por el Ejecutivo municipal, que entonces formaban PNV y EA.
El Consistorio de Ibarra había argumentado al fiscal que el chupinazo no se trataba de un homenaje a los presos, sino de "un acto de reconocimiento a las familias y amigos que sufren la dispersión".
Agirrezabala ha criticado la actuación "amenazante" de Urquijo y ha destacado que la respuesta del pueblo ante esta prohibición "ha sido muy buena y adecuada", al tiempo que ha subrayado que "la fiestas siguen", aunque sea sin chupinazo.
