La Audiencia Nacional condena a multas de 2.160 euros a los jóvenes que irrumpieron en 2005 en el Parlamento vasco

MADRID 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Nacional ha condenado a multas de 2.160 euros a los siete jóvenes que irrumpieron con pancartas el 17 de febrero de 2005 en el Parlamento vasco con el objetivo de reclamar la autodeterminación de Euskadi y rechazar "los juicios contra la juventud vasca" cuando en este tribunal se estaba celebrando el proceso contra las organizaciones Jarrai, Haika y Segi, vinculadas a ETA.

La sentencia, dictada por el juez central de lo Penal, José María Vázquez Honrubia, condena a los jóvenes a penas de nueve meses de prisión como coautores de un delito contra las instituciones de Estado, aunque las sustituye por las citadas multas por "la edad de los encausados" y el hecho de que "la mayoría está en el paro o tiene empleos de baja cualificación".

El magistrado, no obstante, considera a los jóvenes como "los últimos eslabones de un partido ilegalizado", en referencia a Batasuna, y señala que sus actos en la Cámara legislativa vasca fueron realizados "con el auxilio determinante del grupo parlamentario de un partido ilegal", lo que supone "un golpe de mano contra una institución democrática".

Sin embargo, estima la sustitución de las penas de cárcel por las multas al entender que esta medida "será suficiente" para que los condenados "consigan una mínima comprensión de respeto exigible a los valores de la convivencia democrática que evite conductas análogas en el futuro". "Si rechazan o no cumplen la pena sustitutiva (multa) no podrán acogerse a otro mecanismo sustitutorio para evitar la prisión a que han sido condenados", les advierte.

ACTUACIÓN "CLAMOROSA POR FLAGRANTE"

En relación con los hechos, el juez entiende que la perturbación del orden en la Cámara fue "clamorosa por flagrante" y que la actuación de los jóvenes reviste "una evidencia incontestable", a tenor del vídeo de la sesión, que fue visionado durante el juicio, y de los testimonios que realizaron los asistentes al pleno.

Los condenados, Egoitz Garmendia Vera y Naroa López Susaeta por un lado y Jon Ander García Estíbalez, Aitor Juárez Martínez, Ángel Chisvert Sojo, Olatz Urbina Fernández y Oier Martínez del Campo Apaolaza por otro, reconocieron en la vista que entraron en el hemiciclo y en la tribuna de invitados, respectivamente, cuando intervenía la vicelehendakari, Idoia Zenarrutzabeitia, y que exhibieron de forma coordinada carteles con el lema 'Epaiketarik ez gazteok, autodeterminazioa orain' ('No a los juicios, autodeterminación de los jóvenes ahora'). Asimismo, gritaron de forma repetida la consigna "Euskal Gazteria, aurrera" ("Juventud vasca, adelante").

Durante el juicio, que se celebró el pasado 9 de octubre, el fiscal Miguel Ángel Carballo retiró su petición inicial de un año de cárcel y solicitó multas de 15.000 euros para los siete jóvenes, al considerar que éstos perturbaron el orden de la sesión plenaria pero no de forma grave.

Uno tras otro, los acusados fueron relatando ante el juez central de lo Penal que realizaron la protesta para denunciar la "criminalización" que, a su juicio, sufre la juventud vasca por defender el proyecto político de la independencia y el socialismo. "Vamos a seguir luchando en pro de nuestros derechos y nadie va a parar a la juventud vasca", advirtió Oier Martínez.

El momento de mayor tensión del juicio se produjo cuando la abogada defensora y miembro de la Mesa Nacional de Batasuna, Jone Goirizelaia, interrogó al diputado vasco del PP Carmelo Barrio, quien el día de los hechos arrebató la pancarta que portaba uno de los dos jóvenes que se situaron junto a Zenarrutzabeitia. El parlamentario, testigo de la acusación popular ejercida por el Foro Ermua, acusó a los jóvenes de "irrumpir ilegítimamente en el Salón de Plenos y boicotear el trabajo de la Cámara". Este colectivo pidió para los siete jóvenes un año de cárcel.