VITORIA 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces, ha destacado que ETA "ha perdido políticamente" y ha señalado que el terrorismo "solo puede crear dolor, porque no va a cambiar para nada la agenda política ni los hechos políticos".
En declaraciones a los medios, Cabieces, quién ha presidido en Vitoria un acto con motivo del trigésimo segundo aniversario de la Constitución y ha aprovechado para recordar a ETA que, tras su desaparición, al igual que durante su existencia, "habrá Constitución".
Entre los asistentes al acto, celebrado en la Subdelegación del Gobierno en Álava, han asistido el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, y el secretario general de la formación popular en Euskadi, Iñaki Oyarzábal, así como una amplia representación de policías y militares.
En el acto, el delegado ha tenido una mención especial en recuerdo del empresario Inaxio Uria, asesinado por ETA hace dos años. "Uria fue asesinado porque defendía los valores constitucionales, la libertad de crear una empresa. Su muerte certifica que lo único que puede crear ETA es dolor, no cambio político", ha añadido.
Por otro lado, Cabieces se ha referido a la actual situación de crisis económica, y ha subrayado que "es una obligación patriótica trasladar confianza al exterior". "En estos momentos tenemos que pensar que somos capaces de hacer las cosas y transmitirlo al mundo que nos mira", ha afirmado.
En cuanto a la influencia que ha tenido la Constitución en Euskadi, Cabieces ha manifestado que gracias a ella la Comunidad Autónoma Vasca tiene "un autogobierno que le otorga más competencias que en un Estado Federal".
Por otra parte, el delegado ha recordado que este viernes se celebra el 'Día Internacional del Euskera', "un idioma que tiene que servir para comunicar y no para insultar".
"La defensa del euskera está en la Constitución, e un idioma que es nuestro", ha manifestado Cabieces, que ha señalado que durante los últimos seis años el Estado ha destinado tres millones a 'Euskaltzaindia'.
Por último, ante la información difundida en torno a una supuesta reunión de salafistas este verano en Vizcaya, se ha limitado a señalar "ni afirmo ni desmiento que se haya producido dicha reunión", "Es evidente que estamos en Europa y por tanto tenemos las amenazas que tiene el mundo occidental", ha explicado.