BILBAO, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Ertzaintza y las policías locales de las tres capitales y otros municipios pondrán en marcha, a partir de mañana y durante dos semanas, una nueva campaña de control del uso del teléfono móvil durante la conducción. Un total de 3.500 conductores fueron denunciados el año pasado por este motivo en la Euskadi.
Según informó el Departamento vasco de Interior en un comunicado, la campaña será llevada a cabo hasta el 3 de febrero por la Policía autonómica y las locales de las tres capitales, así como otros municipios, dentro del Plan Estratégico de Seguridad Vial 2007-2010; dicho plan pretende continuar incidiendo sobre los riesgos de sufrir o provocar un accidente por la merma de atención en la conducción al atender o realizar una llamada por teléfono móvil.
La realización de esta campaña supondrá un aumento de la vigilancia que se ejerce sobre este comportamiento en los conductores ya que, precisó, hablar por el teléfono multiplica por 9 el riesgo de sufrir un accidente, implica dejar de ver casi la mitad de las señales de tráfico o recorrer 100 metros sin control cuando se circula a 120 km/h.
La Ertzaintza utilizará durante la campaña, además de las habituales patrullas con distintivos, vehículos camuflados para detectar ese tipo de infracciones.
El número de denuncias registradas durante el año 2007 por conducir utilizando dispositivos de telefonía móvil o cascos conectados a reproductores de sonido, según datos provisionales a falta de cerrar los últimos días del año, fue de 405 en el Territorio de Alava, de 1.649 a Bizkaia y de 1.511 a Gipuzkoa.
Esta infracción se considera grave y supone la pérdida de tres puntos en el permiso de conducir, además de una sanción económica de 200 euros.
