MÉRIDA, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP de Extremadura, Carlos Floriano, instó hoy al presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, a rectificar las palabras del vicepresidente del Gobierno regional, Ignacio Sánchez Amor, en las que reconocía sentirse "incómodo" con la reforma del Estatuto catalán, o de lo contrario que éste último sea destituido de su cargo porque "no es de recibo" que ambos mantengan un discurso distinto sobre una misma cuestión.
El líder del principal grupo de la oposición hizo esta reclamación en la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Dirección de su partido, en la que se analizaron las palabras del vicepresidente de la Junta tras el encuentro que mantuvo el pasado jueves con el conseller de Relaciones Institucionales, Joan Saura, en Barcelona.
Para Floriano resulta "lamentable" que "un vicepresidente diga lo contrario a lo que dice el presidente, porque o miente uno u otro", por lo que reclamó a Ibarra que desautorice a Sánchez Amor, o en caso contrario que lo cese de su cargo.
Esta situación, añadió el presidente de los populares extremeños, pone de manifiesto las "contradicciones" del Gobierno regional, que en su opinión "no tiene las ideas claras" en asuntos tan importantes como la definición de España o la financiación de las Comunidades Autónomas.
En concreto, se refirió a las declaraciones de Sánchez Amor acerca de que la inclusión del término nación en el texto provoca "cierta incomodidad" al Gobierno regional, al mismo tiempo que Rodríguez Ibarra se mostró satisfecho con el acuerdo entre Zapatero y el líder de CiU, Artur Mas, advirtiendo al respecto que se había "ganado la batalla a los nacionalistas".
Floriano se mostró conforme con que el vicepresidente de la Junta muestre su "estado de ánimo", pero subrayó que "los políticos estamos para resolver los problemas de los ciudadanos". Por ello, preguntó al Gobierno regional cuál es el motivo que lleva a Sánchez Amor a la incomodidad, y qué hará a partir de ahora para resolver la situación.
En este sentido, propuso que la Junta de Extremadura presente el recurso de inconstitucional como se pactó por parte de los Grupos Parlamentarios en la Asamblea de Extremadura, en el caso de que "la solidaridad deje de ser una función del Estado", como a su juicio ocurre con la reforma del Estatuto catalán.
Así, reiteró que el posicionamiento de su partido es contrario a la reforma del Estatuto catalán por cuanto se incluye el término nación, por la obligación de aprender la lengua catalana, y por la reforma en el modelo de financiación autonómica que implica, que en su opinión rompe con el principio constitucional de la solidaridad entre territorios.
En este sentido, explicó que el nuevo modelo reportaría a Extremadura 306 millones de euros anuales más, frente a los 3.600 que obtendría Cataluña, y que además la comunidad catalana se "garantiza" que las inversiones del Estado se establezcan en función del PIB, con lo que "la diferencia entre las regiones ricas y las pobres serán cada vez mayor".
Además, dijo que el Fondo de Solidaridad previsto para compensar las diferencias de ingresos entre todas las comunidades autónomas, según un informe elaborado por la Fundación de las Cajas de Ahorros (FUNCAS), Extremadura percibiría 1.150 millones de euros, una cantidad inferior a los 1.462 millones que la región ha recibido en el último ejercicio procedente del Estado.
Por último, animó a los diputados socialistas a defender "las tesis de la España constitucional y de la solidaridad" emitiendo un voto contrario a la reforma del Estatuto catalán el próximo día 30 en el Congreso.
