LUXEMBURGO 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha precisado esta tarde que el programa integral para la reinserción de presos terroristas no supone "ningún cambio" en la política que mantiene el Gobierno en relación a ETA y que "no aporta ningún beneficio penitenciario", sino que se trata de un intento por reactivar la vía Nanclares para la reinserción individual de quienes "renieguen públicamente" de la banda.
"No hay cambio de política en relación con ETA, seguimos exigiendo su disolución incondicional. No hemos negociado ni vamos a negociar en ningún momento nada con ETA", ha recalcado el ministro en rueda de prensa en Luxemburgo, al término de una reunión con sus colegas europeos.
Fernández Díaz ha afirmado que el programa es un intento por animar a la reinserción individual "en el marco de la ley penitenciaria" y "sin que por sí mismo represente ningún tipo de beneficio penitenciario". El objetivo, dijo, es que presos pertenecientes a ETA u otras bandas terroristas y criminales "renieguen de manera pública, clara y solemne de su pertenencia" a tales organizaciones.
Según el ministro, desde que ETA anunció el 20 de octubre de 2011 que cesaba su actividad armada ningún preso de la banda ha dado pasos para acogerse a la reinserción individual de la llamada vía Nanclares.
El ministro ha insistido en que esa vía está "cegada" porque la banda terrorista les ha dado "expectativas falsas" sobre posibles negociaciones o amnistías generalizadas y con el nuevo programa se espera "estimular" a estos reclusos "a que vuelvan" a acogerse.