VALLADOLID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
El hostelero Rafael C. del P, juzgado hoy en la Audiencia de Valladolid por delito de estafa, ya que entre los meses de mayo y junio de 2008 realizó a la empresa Helados y Postres S.A. dos pedidos por importe de 1.125 euros que no pagó, alegó en su descargo que si no satisfizo dicho importe fue debido a que "apenas hacía caja" debido a la mala marcha del negocio desde su inicio.
El procesado, para quien, sin embargo, el fiscal mantuvo su petición de dos años de cárcel, multa de 3.000 euros y la obligación de indemnizar a la empresa perjudicada, precisó, en declaraciones recogidas por Europa Press, que las "buenas expectativas" del negocio se vieron truncadas desde el principio puesto que los ingresos durante los dos primeros meses fueron mínimos y en cambio los gastos eran cuantiosos, entre ellos los derivados del alquiler del local, por el que pagaba mensualmente 4.600 euros, y los sueldos de los camareros.
"No entraba nadie y, por ello, la posibilidad de pagar esos pedidos era nula", insistió el procesado, quien aseguró que siempre tuvo intención de abonar el importe de helados al proveedor, al que de la cantidad adeudada, como así precisó, llegó a satisfacer únicamente 100 euros.
El hostelero, que llegó a librar un cheque sin fondos, añadió que si no había podido pagar más es debido a que perdió finalmente el negocio, ya que el propietario del local resolvió el contrato de forma unilateral a los ocho meses de la firma del mismo, y recordó que en la actualidad tiene como únicos ingresos 788 euros del paro con los que tiene que mantener a su esposa y dos hijos de 2 y 3 años.
