BARCELONA 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un juez de la Audiencia de Barcelona decidirá el 11 marzo si los presuntos asesinos de Miguel H.A. deberán ser juzgados por un jurado popular. El juez, que suspendió hoy la sesión por incomparecencia de los tres testigos principales de la Fiscalía, advirtió que la incomparecencia de la testigo Sandra B.V. tendría repercusiones legales contra ella.
Los hechos tuvieron lugar el 4 de diciembre de 2008 cuando la víctima fue obligada a retirar de su cuenta una cantidad inferior a 20 euros para saldar una deuda. Tras ello, los dos acusados, Aitor G.B. y José X.C., junto con un tercero en paradero desconocido apodado 'el legionario', golpearon en la cara y en el pecho a la víctima hasta causarle la muerte con el fin de conseguir el número secreto de su cuenta.
'El legionario', que había estimado que la cantidad sustraía era "insuficiente", se hallaba en el piso donde llevaron a la víctima en compañía de Sandra B.V. Al escuchar los gritos, se sumó a la agresión.
En el juicio de hoy la familia del fallecido no ha podido contener su rabia y a proferido insultos contra los asesinos, que entraron a la sala escoltados por agentes de los Mossos d'Escuadra, y el juez tuvo que reprenderles por sus comentarios. Tras la decisión de suspender el proceso, la hermana de la víctima se ha dirigido a los presentes gritando: "vergüenza".
La Fiscalía pidió para los dos acusados 25 años de prisión por delitos de asesinato y robo con violencia y una indemnización de 250.000 euros para los familiares afectados.