MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
La exconcejala del PSOE Leire Díez declaró ante el juez que le investiga por presuntos delitos de tráfico de influencias y cohecho que, así como hiciera con los socialistas en Ferraz, también se reunió con PP, Podemos y Vox al entender que podrían haber sido "víctimas" de algunas de las operaciones del comisario José Manuel Villarejo. "Había víctimas de todos los partidos y, es más, había carpetas con nomenclaturas de otros partidos también", añadió.
Así consta en la grabación, a la que ha tenido acceso Europa Press, de la declaración que efectuó el pasado 17 de noviembre --en calidad de investigada-- ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 9 de Madrid, el juez Arturo Zamarriego.
Díez relató a preguntas de su abogada que llegó a reunirse en dos ocasiones con Santos Cerdán en 2024, cuando éste era secretario de Organización del PSOE. Según explicó, fue su socia en el digital 'Crónica Libre', la periodista Patricia López, quien consiguió cerrar el encuentro a petición del empresario Javier Pérez Dolset.
La exmilitante socialista precisó que la reunión surgió a raíz de la documentación que existía de las causas relativas a Villarejo, al entender que "el PSOE podía ser víctima de algunas de esas operaciones". "Y por eso, igual que se había hecho con otros partidos y otras personas, lo que se quería era dar esa información" al partido, agregó.
Díez indicó que antes del encuentro con Cerdán ya se habían "mantenido" otras "reuniones" con otras posibles "víctimas". "Efectivamente, había víctimas de todos los partidos y, es más, había carpetas con nomenclaturas de otros partidos también", recalcó.
En el marco de su declaración, la investigada se detuvo a explicar en qué consistían dichas "carpetas", que estaban guardadas en un 'drive' de Pérez Dolset al que ella tenía acceso, y añadió que una de ellas llevaba el nombre "Operación PSOE".
"Yo no soy propietaria de ese 'Drive', se me da autorización y esa carpeta ya existía desde el año 21 (...) La nomenclatura en ningún caso es mía", subrayó, para luego añadir que alguien había "hackeado" dicho 'drive' y que ambos lo denunciaron ante la Policía.
Díez incidió en su comparecencia en que "aparte" de la carpeta "Operación PSOE" había "otras" con "nombres de otros partidos". "Yo ya no quiero revelar más y permítame que no lo haga porque ya bastante bombardeo de correos y de barbaridades he tenido. Pero había carpetas con nomenclaturas de otros partidos políticos y había habido reuniones con otros partidos políticos, porque, en su condición de víctimas, también se les facilitó la misma información", apuntó.
Acto seguido, su defensa le pidió que detallara "con qué otros partidos se habían reunido". Díez contestó: "PP, Vox, Podemos". Preguntada sobre si el PSOE fue el primer partido con el que se reunieron, la exconcejala señaló que no: "De hecho, fueron los últimos".
NO RECONOCE LOS AUDIOS APORTADOS A LA CAUSA
Durante el interrogatorio, su letrada también le preguntó si tenía "poderes de cualquier tipo o mandato de representación del PSOE o de cualquiera de sus miembros o mandos". Díez dijo que no. "Ni lo tengo ni lo he tenido nunca", agregó.
También descartó haber tenido "capacidad para influir en el resultado de un procedimiento judicial o conseguir un traslado, cambio de destino o cualquier beneficio judicial político o de cualquier otra naturaleza".
Cabe recordar que, según la grabación aportada por el fiscal Ignacio Stampa que recoge la reunión que ambos mantuvieron el pasado 7 de mayo, Díez se presentó como la "mano derecha" de Cerdán y como "la persona que ha puesto el PSOE" para ver "qué había detrás" de las "irregularidades" de "algunos miembros de la Fiscalía Anticorrupción".
El día que la investigada declaró ante el juez negó reconocer dicho audio y pidió que se acordara su nulidad. "Usted entonces no reconocía la grabación. Pero ¿la reunión sí la reconoce? ¿Hubo dos reuniones o una reunión con el señor Stampa?", le preguntó su defensa. "Yo reconozco que ha habido una reunión, pero la grabación no la reconozco", apuntó Díez.
Preguntada sobre si le había ofrecido a Stampa "algún favor a cambio de información o de hacer algo que pudiera ser ilícito", se limitó a contestar: "No". Ese día, su abogada también le interrogó por los presuntos sobornos que habría ofrecido al fiscal José Grinda.
"¿Le ha ofrecido usted un destino en el extranjero o resarcirle de una demanda civil en alguna ocasión, directa o indirectamente, a cambio de facilitar secretos comprometedores de alguien?", planteó la letrada, a lo que Díez respondió: "Nunca jamás".
La militante del PSOE tampoco reconoció la grabación de una reunión que habría mantenido con el empresario Alejandro Hamlyn --investigado en la Audiencia Nacional-- en el despacho del abogado Jacobo Teijelo. Manifestó que acudió a dicha sede a pedir asesoramiento profesional al letrado y que "tenía expectativa de mantener el derecho a la intimidad".
RECONOCE REUNIONES CON UN GUARDIA CIVIL
Al margen, sí reconoció haberse reunido con el guardia civil investigado en el 'caso Koldo', Rubén Villalba, el pasado marzo. "Sabe que estoy haciendo una investigación y pide hablar conmigo porque (...) creía que era víctima de todo este caso de Aldama, Koldo y demás", en referencia al empresario y presunto conseguidor de la trama y al exasesor del exministro José Luis Ábalos, ambos investigados.
Dichas reuniones se habrían fijado por intermediación de un tercero, Francisco Ortega, según relató Díez. Además de abordar el mencionado 'caso Koldo', también hablaron sobre el 'caso hidrocarburos', que se investiga en la Audiencia Nacional por un presunto fraude de IVA en el sector de los carburantes. "No tenía nada que ver, por lo menos que yo sepa, con el tema Villarejo", añadió.
En dichos encuentros habrían participado una decena de personas "leales al comandante", según apuntó Díez, quien narró que llegaron a 'cachearle' personas en ambas reuniones. "Me cachearon como probablemente no me han cacheado nunca jamás, ni en un aeropuerto", agregó.
La exconcejala señaló que Villalba le trasladó en dichos encuentros que "sus jefes le habían traicionado" y que él sabía que la Guardia Civil había estado investigando "desde hace mucho tiempo atrás" a Ábalos, Koldo y Aldama. Además, incidió en que, aunque el agente "quiso aparecer como víctima", se dio cuenta de que "tenía problemas para justificar dinero en metálico".
Preguntada sobre si le pidió a Villalba que "maniobrara contra la Guardia Civil", Díez dijo que "no". A su vez, negó haber contactado a la directora de la Benemérita a raíz de esa reunión. Según indicó, la "única" relación que mantuvo con ella fue en su etapa en Correos, "en el contexto de una huelga de transporte".
De igual forma, negó haberle pedido a Villalba información sobre el fiscal Grinda o sobre mandos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Al hilo, su abogada intentó preguntarle a Díez si ella tiene "capacidad" para nombrar o cesar al director adjunto operativo de la Policía Nacional, pero el juez le frenó al considerar que era "evidente" que no.
"Es que son preguntas que las respuestas son absurdas", apuntó el instructor. La letrada contestó que intentaba esclarecer asuntos que habían llevado a Díez a estar investigada. El juez remarcó que no estaba imputada por eso.
En la misma línea, el instructor intentó reconducir las preguntas de las acusaciones populares al considerar que tampoco se ajustaban a los hechos investigados.