Llamazares admite que han "fallado" pero no se puede pedir "absoluta coherencia" a IU-Extremadura y ve crisis en el PSOE

Llamazares sobre el cambio de Gobierno
EUROPAPRESS
Actualizado: miércoles, 13 julio 2011 22:23

Advierte que Rajoy no es ninguna "garantía" de confianza para salir de la crisis porque los mercados "no confían en nadie y son insaciables"

SAN LORENZO DE EL ESCORIAL, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -

El portavoz de Izquierda unida (IU) en el Congreso, Gaspar Llamazares, ha reconocido este miércoles que su partido ha "fallado" y cometido "un error" en Extremadura al no conseguir desarrollar "al cien por cien" su política de alianzas, aunque ha apuntado que tampoco se puede exigir "absoluta coherencia" a la formación en dicho territorio. Asimismo, ha considerado que esto no les equipara al PSOE, donde ha señalado que posiblemente se está desarrollando una crisis interna.

Durante su paso por los Cursos de Verano de El Escorial, organizados por la Universidad Complutense de Madrid, en los que ha intervenido en el seminario titulado 'Democracias y mercados ¿Quién gobierna? ¿Quién debería gobernar?', Llamazares ha insistido en que lo ocurrido en Extremadura "es un accidente en el camino" de la formación y ha considerado que, desde la perspectiva que otorga la distancia, no se debió hacer una campaña diciendo que no se iba a dejar en ningún caso pasar al PP, "porque eso no es así".

"El error ha sido nuestro, es un error de IU, hay que asumirlo como tal, pero yo creo que eso no nos equipara en absoluto al PSOE. Nosotros no hemos traicionado nuestro programa electoral, nosotros no hemos traicionado nuestras ideas de izquierdas", ha argumentado el diputado, quien ha remarcado que el problema surgió al no conseguir completar enteramente su política de alianzas.

No obstante, ha querido reseñar que, aunque se haya "fallado, tampoco en este caso se puede pedir a IU que sea absolutamente coherente". "Hay aspecto en los que hay contradicciones y hay que asumirlas", ha rematado.

EL PSOE ESTÁ EN CRISIS

Dicho esto, en relación a las declaraciones de Felipe González hechas esta mañana, en las que afirmaba que "es militante del PSOE", pero "no simpatizante", Llamazares ha considerado que se trata de una muestra más de que el PSOE está en "crisis" y de que es incapaz de gestionar la situación económica, además de "un llamamiento a la izquierda a que exista alguna alternativa en la izquierda".

"En estos momentos, me da la impresión de que eso quiere decir que es más una relación orgánica que afectiva, a la vez que demuestra también las dificultades que tiene el partido de Gobierno, que ha abandonado buena parte los valores y las políticas más solidarias y más de izquierdas, que se aleja del corazón de sus propios militantes", los cuales "se identifican con su ideología fundamentalmente por razones históricas, orgánicas, pero muy poco afectivas y muy poco políticas", ha reflexionado.

En este sentido, sin embargo, ha recordado que un posible adelanto de elecciones sigue dependiendo del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y que ese debate es más "motivo de tertulias que motivo de análisis político", si bien ha incidido en lo deseable de una reforma de la LOREG, que ha considerado un modelo electoral "canalla". En cualquier caso, ha afirmado, "IU está preparada para el momento en que se decida convocar las elecciones".

GOLPE DE ESTADO DE LOS MERCADOS

Por otro lado, preguntado por si comparte la afirmación del líder de la oposición, Mariano Rajoy, de que el presidente parece un gobernador en funciones que no aporta confianza a los mercados, Llamazares ha resaltado que en Portugal ya cambiaron de Gobierno y los mercados no respondieron, por lo que ha considerado que la figura de Rajoy "no es ninguna garantía de que los mercados no se ceben con España, Inglaterra o Irlanda".

"Los mercados no confían en nadie, son insaciables y han ido a por Portugal en cuanto han podido. El reto es tener una Europa política y no una de mercachifles", ha enfatizado, al tiempo que ha considerado que gran parte de Europa sufre por una crisis de la izquierda, que "no es capaz de dar respuesta" al "golpe de Estado que han dado lo mercados".

Según el portavoz de IU, la Unión Europea asiste a "un grave ataque a su identidad, a la política y a la izquierda" y el mayor de los problemas es que "se está actuando con pasividad y resignación".