El lehendakari afirma que no es "muy de patrias" y menos de aquellas que "ponen el territorio y la identidad por encima de las personas"
BILBAO, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari Patxi López ha criticado que "el mundo de Batasuna" haya atrapado "a todo lo que se acerca a su órbita, incluido al PNV" y ha advertido de que existe el riesgo de que Euskadi "pueda volver al viejo pantano del debate identitario". En esta línea, cree que "no es división lo que necesita la sociedad en estos momentos" y lamenta que los nacionalistas propongan abiertamente una independencia que "fractura a Euskadi".
En un artículo publicado en su blog, recogido por Europa Press, el lehendakari analiza la jornada del Aberri Eguna y recuerda que en Euskadi el relato del Domingo de Resurrección se ve ocupado desde hace muchos años por los discursos de las formaciones nacionalistas en una clave de exaltación y reivindicación de una patria "siempre inacabada, siempre por construir, siempre sojuzgada por cadenas más o menos ficticias".
"Es un clásico ya. Supongo que la inactividad que impone las vacaciones de Semana Santa contribuye a que las celebraciones de quienes se autoproclaman abertzales ocupen todo el espacio. Este año, el grato silencio de ETA después de tanto tiempo ha hecho que se escuchen con más nitidez los mensajes de las distintas opciones, reducidas ahora al mundo de Batasuna, que ha atrapado a todo lo que se acerca a su órbita, incluido al PNV", incide.
A su juicio, aunque divididos en tres bloques, este año el contenido de los mensajes nacionalistas ha sido "más coincidente que nunca al plantear la independencia, no como una aspiración retórica y diferida en el tiempo, sino como una posibilidad casi inmediata".
"Sin duda, el marcaje del PNV a una Batasuna que se ha visto obligada a jugar finalmente con las exclusivas armas de la política, ha contribuido a desnudar las aspiraciones finales del nacionalismo vasco de eufemismos como derecho a decidir o soberanismo", manifiesta.
Para López, en estas pulsiones siempre hay un "efecto contagio", en el que ha influido la deriva del nacionalismo catalán y el referéndum apalabrado para 2014 por el Partido Nacional de Escocia (SNP). "Y, por supuesto, el hecho de que el próximo año tendremos elecciones autonómicas, unos comicios muy importantes para todos los vascos y las vascas, pero decisivos para la disputa entablada entre el PNV y el universo de Batasuna por la hegemonía nacionalista", añade.
En esta línea, el lehendakari considera que la ciudadanía tiene que ser "muy consciente de esta realidad". "Y es mi responsabilidad advertirla, sin dramatización alguna, pero con claridad: existe el riesgo de que Euskadi pueda volver al viejo pantano del debate identitario que absorbió nuestras energías durante casi una década. Esta vez recrecido y más a cara descubierta, pero igualmente estéril y dañino para una sociedad plural en sus identidades y opciones", añade.
En su opinión, no se proponen acuerdos ni escenarios para sumar nuestra pluralidad y diversidad, sino que se propone abiertamente una independencia que "fractura a Euskadi, a sus territorios y a su sociedad".
"Se propone la vuelta a la política de bloques, a la confrontación y al enfrentamiento permanente. Y desde luego, no es división lo que necesita la sociedad va en estos momentos", lamenta.
Asimismo, recuerda que se ha oído mucho hablar de independencia, de Pueblo Vasco con mayúsculas, de Estado propio, pero poco de los ciudadanos que viven en esa geografía que "todo el nacionalismo ya ha acotado entre el Ebro y el Adour".
"Y apenas nada de sus preocupaciones y necesidades. El paro, el sostenimiento de los servicios públicos, las urgencias de la crisis y las distintas opciones para salir de la recesión que nos amenaza estuvieron prácticamente ausentes de los discursos del Aberri Eguna, demostrando cuáles son las prioridades de sus celebrantes", manifiesta.
Por lo que respecta a los reproches de que sea un lehendakari que no celebra el Día de la Patria Vasca, López reconoce que "no soy muy de patrias y menos de aquellas que ponen el territorio y la identidad nacional por encima de las personas".
"Yo he celebrado el Aberri Eguna. Lo hice cuando había un régimen que reprimía y negaba nuestras libertades. Una vez que logramos recuperarlas y Euskadi pudo ser, por primera vez, una realidad política, para mí el verdadero Día de la Patria es el que recuerda el pacto que permitió que los vascos de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa emprendiéramos un proyecto común dentro de España y Europa. Porque el Estatuto de Gernika, con las virtudes, limitaciones y renuncias que contiene, hizo factible la patria que nos reconoce como ciudadanas y ciudadanos vascos con derechos, libres e iguales. A los nacionalistas y a quienes no lo somos", finaliza.
