Miguel Sanz asiste a los actos de reapertura de la catedral de Tudela

Actualizado: domingo, 16 julio 2006 13:52

PAMPLONA, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, asiste hoy desde las 11,15 horas a los actos de reapertura de la catedral de Tudela tras los trabajos de restauración del templo realizados durante los últimos meses.

La catedral ha reabierto sus puertas este fin de semana con un programa de actos oficiales tras cuatro años de obras y una inversión de 9,1 millones de euros. Las obras se han realizado entre abril de 2002 y julio de 2006, y han comprendido el interior de la catedral con sus capillas, las dependencias de la cabecera y la casa situada junto a la fachada occidental.

A las 12 horas de hoy se celebrará una misa solemne acompañada por la Capilla de Música de la catedral de Pamplona. La catedral de Tudela permanecerá abierta al culto desde el 16 hasta el 30 de julio y a lo largo de este periodo se oficiarán dos misas diarias; a las 8 y a las 11 de la mañana.

Durante el mes de agosto el templo permanecerá cerrado con motivo de la preparación de la exposición "Tudela. El legado de una Catedral" cuya inauguración está prevista para el 8 de septiembre.

Durante la exhibición de la muestra se celebrarán misas todos los días a las 11 horas en la capilla de Santa Ana, si bien no se celebrarán bodas hasta su conclusión el 8 de diciembre.

La intervención, concebida como un proyecto de carácter integral, ha incluido la excavación arqueológica del subsuelo, que ha permitido poner de relieve numerosos elementos de la evolución histórica del edificio y de la propia ciudad de Tudela, así como la restauración y puesta en valor de todos y cada uno de los bienes muebles que alberga; más de cuarenta conjuntos en total, entre los que se incluyen retablos, lienzos, tallas, rejas, espejos o la sillería del coro, así como yeserías y pinturas murales, que se han realizado de acuerdo con proyectos técnicos redactados específicamente para cada uno de los conjuntos.

Gracias a esta intervención se han descubierto conjuntos y piezas artísticas que permanecían ocultos, como la policromía del sepulcro del Canciller de Villaespesa, las pinturas murales góticas de la Sacristía de la Capilla del Espíritu Santo o los "grutescos" de la reja de la sillería del coro.

Los trabajos, promovidos y financiados por la Fundación para la Conservación de Patrimonio Histórico de Navarra, han constado de siete fases diseñadas y dirigidas por los técnicos del Servicio de Patrimonio Histórico del Departamento de Cultura y Turismo-Institución Príncipe de Viana, y han supuesto una inversión, hasta la fecha, de 9.131.300 euros, financiados con aportaciones del Gobierno de Navarra y de la Fundación Caja Navarra.

Según ha destacado el consejero Corpas, estas obras constituyen la intervención en patrimonio histórico más importante de las realizadas hasta la fecha en Navarra, y garantizan la pervivencia y conservación para las futuras generaciones de un conjunto histórico-artístico de gran importancia para toda la Comunidad Foral.

Las obras de restauración han pretendido dar respuesta a las deficiencias que presentaba la catedral, y han tenido como objetivos la conservación del edificio y de los bienes fijos y muebles que contiene, el conocimiento y valoración de su historia y evolución constructiva, la mejora de las condiciones de funcionamiento y de su uso litúrgico, así como la comprensión, el aprecio y disfrute de quienes lo visiten.

La catedral permanecerá abierta al culto durante quince días, hasta el 30 de julio. El 8 de septiembre se inaugurará en su sede la exposición "Tudela. El legado de una Catedral", que mostrará todo el proceso de restauración, la historia y evolución del edifico y sus diferentes configuraciones, así como la puesta en valor de todos los bienes muebles que alberga y que constituyen una síntesis de la Historia del Arte de Navarra desde el románico hasta el siglo XVIII.

La catedral de Tudela se erigió sobre la antigua mezquita mayor de Tudela, y su trazado original está marcadamente influenciado por las estructuras islámicas precedentes. En 1121 la mezquita se consagró al culto cristiano y se convirtió la sala de oraciones en iglesia.

Anexas a ella se levantaron las primeras partes de la catedral románica: la cabecera, el crucero y el claustro. Por último, para construir las naves de la catedral se derribó la sala de oraciones y se levantó el cuerpo del templo a lo largo del siglo XIII.

La catedral presentaba diversas deficiencias derivadas de las características de la piedra con la que está edificada, de filtraciones de agua, otras debidas al normal envejecimiento y a la suciedad acumulada en el transcurso del tiempo, y algunas causadas por el desigual resultado y obsolescencia de reparaciones y arreglos efectuados en diversas épocas.

La sucesión y superposición de edificaciones y obras, normal en las catedrales, también había producido problemas de tipo constructivo, además de pérdida de percepción de las etapas de construcción y el ocultamiento de aspectos de interés.

Desde finales del siglo XIX se habían venido sucediendo obras de restauración o reparación en el conjunto catedralicio, pequeñas en aquella centuria, de alguna entidad en los años veinte y treinta del pasado siglo, y bastante continuadas desde los años cuarenta, frecuentemente a cargo de la Institución Príncipe de Viana, aunque siempre limitadas a elementos concretos. Las reparaciones en el interior del templo se habían centrado en la fábrica de piedra, además de la apertura completa de los ventanales.

Las obras del interior del templo ahora realizadas han incluido el desmontado y sustitución del pavimento, lo que ha permitido la excavación arqueológica del interior, con la que se ha completado la planta de la mezquita aljama de Tudela y se ha definido el entorno urbanístico del templo en época medieval, tanto islámica como cristiana, desconocido hasta la fecha.

Se han restaurado las bóvedas de las naves, del transepto y de la capilla mayor; las capillas del templo; los bienes fijos y muebles, salvo el retablo mayor, restaurado en el año 2000, así como las carpinterías y todo el mobiliario.

Asimismo, se ha rehabilitado la casa situada entre la catedral y el palacio decanal, y se ha renovado la capilla del Cristo de la Cama. Además, se han sustituido las cubiertas de las capillas y de la nave meridional del templo, y se han reparado en varios lugares por el exterior los muros, las cornisas y algunos vanos.

En cuanto a instalaciones, se ha colocado calefacción en todo el templo y se han renovado las de electricidad, megafonía, seguridad e iluminación, adaptadas todas ellas a las necesidades del culto que se celebra en la catedral y a las derivadas de la visita turística, que se realiza casi siempre en horario diurno. Estas instalaciones han tenido presentes las posibilidades y limitaciones que ofrece la arquitectura del interior del templo, el confort de sus usuarios y la accesibilidad de los aparatos para su mantenimiento.