MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, condenó hoy "claramente", en nombre del Gobierno, la represión violenta por parte de la Junta Birmana de las manifestaciones pacíficas de las últimas semanas y exigió la inmediata liberación de los opositores encarcelados.
En la sesión de control al Gobierno, y en respuesta a una pregunta del diputado socialista Juan Moscos, afirmó que el Ejecutivo sigue "con gran preocupación" la situación en este país, donde la represión violenta de las manifestaciones "pone una vez más de manifiesto la triste situación en la que se encuentra la población birmana desde hace décadas".
"La actitud de desprecio del régimen militar birmano hacia los derechos humanos y la voluntad popular han condenado al país al atraso y al aislamiento", indicó el ministro, quien advirtió de que la comunidad internacional "no puede permitir en pleno siglo XXI que la fuerza se imponga y que se produzca un baño de sangre inocente".
El ministro quiso rendir homenaje a la líder de la oposición opositora Aung San Suu Kyi, así como a otros dirigentes, que llevan "años dando al mundo lecciones de tolerancia y entrega desde sus arrestos domiciliarios y la cárcel".
Moratinos aseguró que España se ha "unido al clamor de la comunidad internacional y al sentimiento de solidaridad hacia el pueblo birmano". En este sentido, recordó que la embajadora española para los Derechos Humanos, Silvia Escobar, está a la espera de que las autoridades birmanas le concedan el visado para entrar en el país.
