Moratinos cree que la mención de España en el debate entre Biden y Palin demuestra la "relevancia" de este país

MADRID 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, destacó hoy que la nueva mención a España en el debate entre los candidatos a la vicepresidencia de Estados Unidos demuestra que este país tiene "importancia y relevancia" para Washington.

Así se manifestó en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press y tras ser preguntado por las declaraciones que esta madrugada (hora española) realizó el demócrata Joseph Biden, que calificó de "increíble" que el candidato republicano a la Casa Blanca, John McCain, dijera recientemente que "no se sentaría" con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.

Un comentario que, según el ministro, "refleja la importancia y relevancia" de España, que es "socio de la Alianza Atlántica", además del "octavo contribuyente a Naciones Unidas" y la "octava economía del mundo". Todo ello unido a que posee "gran influencia" en América Latina, "que interesa mucho a los norteamericanos", y en Oriente Próximo, región que ha dado "tantos quebraderos de cabeza" a la Administración Bush.

Sin contar con la relación de España con el ámbito mediterráneo y con su próxima presidencia de la UE en 2010, añadió. "Todos los elementos están ahí presentes para que en un debate de política exterior España no esté ausente", remachó Moratinos.

El jefe de la Diplomacia española quiso resaltar que, a pesar de la "cercanía ideológica" entre el PSOE y el Partido Demócrata, los equipos de ambos candidatos a la Casa Blanca le han trasladado la voluntad tanto de Obama como de McCain de "mejorar la relación con España".

Tras ser interpelado acerca de qué candidato conviene más a Estados Unidos para hacer frente a la actual crisis financiera internacional, subrayó que lo que hace falta es una "respuesta internacional", de Europa "concertada con Estados Unidos".

A juicio del Gobierno español, son precisas "nuevas instituciones financieras que se adapten a los retos del siglo XXI", junto con "nuevas normas, más transparencia y mayor corresponsabilidad en la gestión de todos los flujos financieros".