Rahola humaniza a Mas y combate los tópicos del líder de CiU

BARCELONA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -

El libro 'La màscara del rei Artur" (La Magrana) que se presenta hoy, de la periodista Pilar Rahola, humaniza la figura del candidato de CiU a la Generalitat, Artur Mas, y combate los principales tópicos personales que arrastra.

Ya en la primera página del libro, Rahola advierte de que se trata de un libro no apto por quienes van con "el carnet en la boca". Dice que su propósito es acabar con las "leyendas urbanas" que envuelven el candidato, y también con sus estereotipos.

Entre ellos, que no es amigo de Pujol, que sus relaciones con Josep Antoni Duran (UDC) no son buenas, que es un continuador de Lluís Prenafeta, que es como un 'madelman' o un robot, que él y su mujer Helena Rakosnik son unos 'pijos' y que necesita a su entorno --más conocido como el 'pinyol'-- para sobrevivir políticamente.

La propia Rahola reconoce que un dirigente socialista comunicó que al PSC no le interesaba que se publicase este libro: "Nos irá fatal que hagas este libro. Porque lo humanizará. Y lo que necesitamos es el madelman, un robot títere, y no un tío que sea humano".

Precisamente, Mas se define como persona tímida y admite que le molesta su estereotipo en el programa de sátira política 'Polònia' de TV3, que lo representa como una persona atractiva con un deje de prepotencia y pijerío.

Asegura que es una imagen "irreal" y que lucha con naturalidad para que desaparezca, aunque admite que ser guapo no le ha ayudado en su carrera política. "La simbiosis de decir es guapo y además tiene aire de ser el primero es letal", dijo.

Sin embargo, niega que este triunfo sea una realidad porque ha sufrido mucho y las ha pasado "putas" en diversos aspectos, entre ellos, el familiar. Y es que su familia ha estado marcada por las enfermedades, empezando por su padre, dos hermanas y el cáncer de su mujer.

Tras explicar que dejó a una "media novia" cuando conoció a su mujer, asegura que ha tenido bastantes oportunidades de serle infiel, y más ahora que cuando tenía 20 años. Sin embargo, cuando se casó se autoimpuso unos principios de fidelidad hacia ella, aunque dijo que no sabe qué pasaría si tuviera la oportunidad con Michelle Pfeiffer, porque le gusta "mucho".

Atribuye al vicepresidente del Govern, Josep Lluís Carod-Rovira, y a ERC el mito de que habla en castellano con su mujer "para ponerme al mismo nivel que Pasqual Maragall, que sí habla con Diana Garrigosa en castellano".

Sobre sus amistades, Mas reconoce que las tiene fuera de su partido, aunque tiene una especial relación con el senador Jordi Vilajoana. Sus amigos son de la escuela, alguno de su época como concejal en el Ayuntamiento de Barcelona y muchos de Vilassar. Sin embargo, pone distancia con los miembros de su partido, incluso con los del 'pinyol': "Tengo que tomar decisiones que afectan a personas y no sería bueno mezclar las cosas".

RELACIONES CON PUJOL

En cuanto a las relaciones entre Mas y Jordi Pujol, Rahola indica: "Quizás no son amigos, no hablan a menudo y recelan mutuamente, pero Pujol le tiene un afecto de verdad".

El portavoz parlamentario de CiU, Oriol Pujol, admite que Mas "no cuida" a su padre. El ex presidente "sólo quería que Mas le tuviera en cuenta, que a veces le llamase para comentar la jugada, o para ir a comer, pero Mas no lo hace nunca", agrega Oriol Pujol.

Mas también deja claro que él no es un continuador del ex presidente, ya que el denominado pujolismo "acabó" cuando abandonó la Generalitat, en 2003.