MADRID, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, no se ha pronunciado este jueves sobre la fecha del próximo Congreso del PSOE, subrayando que el PSOE ha decidido dejar el debate sucesorio para después de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo.
"Ya hemos decidido no hablar de esto hasta después de las locales, por lo tanto a eso me remito", ha declarado Jáuregui en los pasillos del Senado, preguntado sobre si él consideraría conveniente un Congreso del PSOE antes de las generales de 2012, para que el próximo candidato socialista se presente a las elecciones siendo también secretario general del partido.
Por su parte, el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha insistido este jueves en que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tiene intención de continuar como líder del partido. Blanco ha asegurado esta semana que la previsión de Zapatero es que el Congreso sea después de las generales de 2012.
También ha pedido esperar al 23 de mayo antes de hablar de la sucesión el secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, miembro de la dirección federal del PSOE como secretario de Política Autonómica.
En declaraciones a Punto Radio recogidas por Europa Press, Zarrías ha evitado pronunciarse entre el vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba y la ministra de Defensa, Carme Chacón --"lo veremos", ha dicho-- y ha afirmado que sería "un error de bulto" que el PSOE se dedicase ahora a "algo que no toca" en vez de centrarse en las elecciones del 22-M.
A su juicio, el sábado fue "un día importante" y "a partir de ese momento se abren una serie de alternativas y perspectivas para el PSOE". "A partir del día 23 habrá que verlo. ¿Uno o dos? Se decidiría, y no es que nos confabulemos (para no hablar) es que sería un error de bulto dedicarnos a algo que no toca", ha recalcado.
Preguntado si sería partidario de limitar los mandatos de los presidentes del Gobierno, Zarrías lo ha considerado "importante e interesante" como "reflexión teórica", pero ha recordado que el sistema español no es presidencial, sino parlamentario, por lo que las prácticas que debe aplicar son las de los sistemas parlamentarios.
