MADRID 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las víctimas del terrorismo de ETA han reaccionado con rechazo o escepticismo a la noticia del nombramiento del parlamentario del PSE, Jesús Loza como Comisionado para la Convivencia y Memoria, figura creada por el lehendakari Patxi López. Desde la mayoritaria AVT rechazan de plano esta figura y además creen que "no es la persona más adecuada", desde la Fundación Miguel Blanco denuncian la "opacidad" del ejecutivo vasco en este asunto, mientras que desde Covite lo ven como "más de lo mismo".
"No me parece la persona más adecuada", ha dicho en declaraciones a Europa Press la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, quien ha querido dejar claro que su rechazo es contra la idea misma de crear un Comisionado para este asunto. "Aquí si hay algo que gestionar lo deben hacer las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado", ha enfatizado Pedraza, quien ha asegurado conocer a Loza.
"Le conozco, ha estado al servicio del PSE. Yo hice una exposición el año pasado ante la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Vasco de lo que pensábamos las víctimas y tenía mucho miedo de lo que me pudieran decir desde los partidos de ideología abertzale, pero quien más se enfadó conmigo fue Jesús Loza, que representaba al PSE", ha relatado Pedraza.
Loza, médico de profesión, es parlamentario y secretario primero de la Cámara vasca en representación del PSE-EE. Es miembro de la ponencia parlamentaria de Víctimas del Terrorismo y de la de Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos del Parlamento vasco, la conocida como ponencia de 'víctimas policiales y parapoliciales'. Actualmente es vicepresidente de la Fundación Fernando Buesa Blanco Fundazioa.
Desde la fundación Miguel Ángel Blanco, Cristina Cuesta se ha mostrado escéptica y ha afirmado que su opinión sobre Loza, al que conoce, "dependerá de las funciones concretas que tenga previsto desempeñar". En ese sentido, ha denunciado la "opacidad" con la que el Gobierno vasco se ha manejado en este asunto y ha afirmado que a los colectivos de víctimas no se les ha informado ni se les ha consultado nada sobre esta cuestión.
Por su parte, una de las personas que más años lleva trabajando para el Colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco (Covite), Kati Romero, conoce a Loza "desde hace muchos años" y dice que "es verdad que conoce bien y es una persona cercana a la realidad de las víctimas". Sin embargo, ve esta iniciativa de Patxi López como "más de lo mismo, un nombramiento más". En ese sentido, achaca los últimos movimientos del lehendakari a "un intento de ganar votos".
El Comisionado para la Convivencia y Memoria es una institución que se encargará de ejecutar la política del Gobierno en materia de convivencia y superación de las consecuencias del terrorismo en Euskadi, según dio a conocer el pasado jueves el lehendakari. Forma parte de sus propuestas para consolidar el final del terrorismo, junto a la iniciativa para la puesta en marcha de una ponencia parlamentaria sobre este tema y otras medidas.
FUNCIONES DEL COMISIONADO
Loza se encargará de las relaciones ordinarias con el Gobierno central y con otras instituciones para la consecución de esos objetivos y de otros que en ese ámbito le encomiende el lehendakari.
Además, coordinará las diferentes actuaciones "tendentes a favorecer la reinserción de los presos y la integración democrática de los huidos que no tengan causas pendientes con la Justicia". Otra de sus funciones será la coordinación de las actuaciones que los distintos órganos y departamentos del Gobierno realicen en el ámbito de la memoria y la convivencia.
A través de este Comisionado, se convocarán periódicamente reuniones con los representantes de las fuerzas con representación institucional para estudiar aportaciones o sugerencias. Esta última función abre la vía a posibles reuniones con Bildu o Amaiur, las coaliciones de las que forma parte de la izquierda abertzale junto a otros partidos.