El violín Vuillaume, que perteneció a Pablo Sarasate, restaurado esta mañana en Pamplona

Actualizado: martes, 27 mayo 2008 16:08

PAMPLONA, 27 May. (EUROPA PRESS) -

El luthier croata Zeljko Haliti restauró esta mañana el violín Vuillaume, instrumento que perteneció a Pablo Sarasate y forma parte del legado que el músico dejó al Ayuntamiento de Pamplona en 1893.

Este acto, que tuvo lugar en la sala-museo Sarasate (calle Mercado, 11) se enmarca dentro de los actos conjuntos entre Ayuntamiento de Pamplona y Gobierno de Navarra con ocasión del centenario de la muerte del violinista y compositor pamplonés Pablo Sarasate.

De este modo, el Gobierno de Navarra, a través de la Institución Príncipe de Viana, ha propuesto la restauración del instrumento, que posteriormente se utilizará en conciertos de la Orquesta Sinfónica de Navarra. Por su parte, el Consistorio, además de ceder el local, ha dado el permiso correspondiente para la restauración del instrumento y para su posterior utilización en estos conciertos.

Las partes del violín Vuillaume que se han restaurado son el alma y el arco. El alma es una pequeña barra cilíndrica de madera situada en el interior de la caja que cumple una doble función: ser soporte estructural y mejorar la transmisión de los sonidos dentro de la caja de resonancia. Por su parte, el arco es la vara estrecha de curva suave que se utiliza para frotar las cuerdas para que vibren y suenen.

Este instrumento se utilizará en los conciertos que la Orquesta Sinfónica de Navarra va a llevar a cabo durante el curso 2008-2009. Estará en las manos de los intérpretes del primer violín, también llamado concertino, Vicente Balaguer y Corrado Bolsi.

La persona que se ha elegido para restaurar el violín Vuillame es el croata Zeljko Haliti, natural de Split. Este músico recibió su formación en el Conservatorio de Zagreb y en la Guildhall School of Music de Londres.

Ha sido intérprete de orquestas de renombre de varios países, entre otras la Orquesta Filarmónica de Eslovenia, la Ensemble Instrumental de Grenoble (Francia), la Orquesta Sinfónica de Bienne (Suiza) y la Orquesta de Cambra de l'Empordá (España).

Además, su pasión por el sonido le ha llevado a trabajar como luthier, es decir, restaurador de instrumentos de cuerda. Entre los instrumentos que ha restaurado destacan algunos, en buena parte del siglo XVIII, salidos de los talleres de A. Stradivarius, L. Storioni, G.F. Presenda, C.B. Guadagni, P. Testore, D. Teccler.

En la actualidad, Zeljo Haliti reside en España y es primer violín y director musical del Barroco Arte Cordis, un grupo de música antigua ubicado en Cubillas de Santa Marta (Valladolid).

El violín Vuillaume forma parte del legado que Pablo Sarasate dejó a la ciudad de Pamplona en 1893 y, junto a otros objetos y partituras, forma parte de una exposición permanente situada en la sala-museo de Pablo Sarasate en el edificio del Archivo Municipal (C/ Mercado, 11).

Además de este y otro violín, llamado Gaud & Bernardel, en este legado destacan el piano Bechtein, un retrato del músico realizado por el pintor José Llaneces en 1894 y un busto en bronce de Mariano Benlliure. La exposición, que cuenta con 276 objetos, se trasladará antes de final de año al Palacio de Condestable.

En cuanto a las actividades realizadas con motivo del centenario de la muerte del músico pamplonés, Gobierno de Navarra y Ayuntamiento de Pamplona han editado un folleto conmemorativo y, junto con las entidades musicales y culturales más importantes de la Comunidad foral, han organizado diversas actividades durante todo el año entre las que se encuentran actos oficiales, un concurso de escultura, conciertos, exposiciones, ediciones y grabaciones, cursos de verano, cuentacuentos y la edición de una página web.

Además, en Pamplona se va a señalizar un recorrido turístico que marcará los hitos más importantes de la ciudad en la vida de Sarasate, como el Paseo que lleva su nombre, su casa natal en la calle San Nicolás o el monumento que se levantó en su honor en el Parque de la Media Luna.