(Ampli) El voto en blanco de los socialistas propicia la reelección de Miguel Sanz como presidente del Gobierno foral

Actualizado: sábado, 11 agosto 2007 21:38

PAMPLONA, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -

Miguel Sanz, candidato de UPN, salió reelegido hoy por mayoría simple presidente del Gobierno foral. De acuerdo con el mandato de la dirección federal de PSOE, los 12 parlamentarios del grupo socialista favorecieron la investidura mediante su abstención o voto en blanco.

Sanz obtuvo 24 apoyos, los 22 de su grupo, Unión del Pueblo Navarro, y otros 2 de Convergencia de Demócratas de Navarra, partido con el que formarán un Gobierno en minoría. Votaron en contra los 12 parlamentarios de Nafarroa Bai y los 2 de Izquierda Unida.

No hubo sorpresas y todos los integrantes del grupo socialista acataron la decisión de Ferraz. Once votaron en blanco y se registró una abstención. Como se recordará, la dirección del PSOE, debido a su potestad en pactos, rechazó a principios de agosto que PSN materializara un acuerdo de gobierno con Nafarroa Bai e IU, en contra del criterio de las bases del partido.

Miguel Sanz, tras once años como presidente, afronta así su cuarta legislatura al frente del Gobierno foral. Ayer no consiguió la mayoría absoluta necesaria y hoy recabó la mayoría simple (más votos a favor que en contra). No computaban los votos blancos, nulos o la abstención.

El presidente tomará posesión de su cargo, ante la presidenta del Parlamento foral, el jueves 16 o el viernes 17. Antes, el Rey deberá proceder a su nombramiento, que deberá ser recogido en el Boletín Oficial del Estado y en el Boletín Oficial de Navarra.

Ion Erro, coordinador general de IUN y parlamentario foral, destacó que la sesión que la sociedad navarra no estuvo "representada" en el Parlamento. Patxi Zabaleta, de NaBai, apuntó que si no ha habido un gobierno alternativo no es por culpa de la coalición. "La gente que votó PSOE votó por el cambio y las estructuras estaban por el cambio. En los anales quedará el veto por motivos políticos", comentó.

CONCENTRACIÓN

Mientras se desarrollaba la votación, en el exterior del Parlamento, más de un centenar de personas, muchas del ámbito socialista y cargos públicos de Nafarroa Bai, protestó por la reelección de Sanz. Entre los asistentes, varios representantes de agrupaciones socialistas de la Ribera de Navarra.

Ayer, miembros de 23 de ellas exigieron la dimisión de la Ejecutiva Regional y el voto en contra en la sesión de investidura. Los manifestantes recibieron con pitos a los parlamentarios de UPN, CDN y PSN. Patxi Zabaleta, líder de NaBai, y Ion Erro, de IUN, fue aplaudidos.

Los manifestantes cortaron la calle y abuchearon a Carlos Chivite, secretario general de PSN, pidiendo su dimisión. Antes de la investidura, pidieron a Juan José Lizarbe, anterior secretario general, que votara en contra. Al concluir la sesión, fue recibido con pitos.

MES Y MEDIO DESPUÉS

La votación de hoy puso punto final a un proceso que se inició hace mes y medio, tras los comicios del 27 de mayo. El resultado de este proceso es nuevamente un gobierno de UPN y CDN, en minoría y con el compromiso de "rebajar el tono" y evitar la crispación, y un Partido Socialista nuevamente en crisis.

Tras las elecciones, PSN, Nafarroa Bai e IUN consensuaron unas bases y una estructura de gobierno pero la Ejecutiva Federal imposibilitó el pacto, demandado por la Ejecutiva y el Comité regionales.

Sanz afirmó que si aceptaba la presidencia era porque tenía constancia de que iba a concluir la legislatura. No obstante, el PSN ha adelantado que no le da un "cheque en blanco". Así las cosas, no se descarta ni una moción de censura por parte de la oposición ni convocatoria de elecciones anticipadas, capacidad que recae en el propio Sanz.

En todo caso, el veto de Ferraz motivó la dimisión de Fernando Puras, candidato socialista. El reguero de renuncias dentro de socialismo navarro ha continuado esta semana, con la saldia de toda la plana mayor de las Juventudes Socialistas y cinco cargos de la Ejecutiva.

Un centenar de militantes de 23 agrupaciones de la Ribera reclaman la dimisión de todos los integrantes de la Ejecutiva. Y el grupo crítico que perdió la dirección en el congreso de hace tres años, reunido en torno a Lizarbe, también demanda la convocatoria de un congreso extraordinario. Para el próximo 1 de septiembre se ha convocado un comité regional, con asistencia de Pepe Blanco, secretario de Organización del PSOE.